Lionel Messi, sin duda alguna, revolucionó el fútbol de Estados Unidos, y rápidamente se convirtió en la máxima figura del Inter Miami. Sin embargo, no pudo estar en plenitud física durante los últimos compromisos y el equipo dirigido por Gerardo Martino quedó eliminado de la fase final de la MLS.
Igualmente, el astro argentino tuvo una noche para el olvido este sábado en el estadio DRV PNK, luego de que el conjunto de la Florida cayó 0-1 como local frente al FC Cincinnati, donde juegan los colombianos Santiago Arias y Yerson Mosquera.
El rosarino, que fue suplente, entró en el segundo tiempo y no pudo ayudar a sus compañeros para evitar la derrota ante su público. Además, protagonizó una caliente discusión en los minutos finales con Arias.
Todo se presentó en el tiempo de reposición, cuando Messi le cometió una falta en ataque al lateral antioqueño, el cual aprovechó la situación para fingir una agresión sin pelota y ganar unos segundos.
Al campeón del mundo no le gustó para nada el gesto del cafetero y lo encaró de inmediato, reclamando airadamente. La transmisión oficial del partido mostró la pequeña pelea entre Lionel y Arias, quien no le restó importancia al reclamo del argentino.
Cabe recalcar que el Inter, que necesitaba ganar para asegurarse seguir con vida, cayó al decimocuarto lugar de la Conferencia Este de la liga estadounidense y se quedó estacionado con 33 puntos.
Pese a que le quedan dos partidos por jugar, el equipo que dirige Gerardo Martino se encuentra a siete puntos de la novena plaza, la última que da acceso a los playoffs finales.
Messi, que volvía tras cuatro partidos de baja, lució fuera de ritmo y no pudo ser esta vez el salvador de Miami, que encajó la primera derrota en los 13 partidos en los que ha contado sobre el césped con el capitán albiceleste.
“A Messi lo vi falto de fútbol. La lesión está bien, no tiene ningún problema, pero es lógico porque en los últimos tiempos ha jugado muy poco y podía pasar que esté falto de ritmo”, manifestó Martino ante la prensa.
El Inter gozó de algunas oportunidades de gol en la primera mitad, pero en la segunda resintió el cansancio frente a un Cincinnati que, aunque ya clasificado como líder general, estaba muy motivado por sacar del camino al que podría haber sido un envenenado rival en playoffs.
La llegada a mediados de julio de Messi transformó al conjunto de la Florida, entonces el peor equipo de la MLS, en un equipo temible y lo catapultó hasta el primer trofeo de su historia en la Leagues Cup al lado de sus exsocios del Barcelona, Sergio Busquets y Jordi Alba.
Pero los problemas físicos que comenzó a sufrir Messi en septiembre, aunados a los de otros compañeros, como Alba en un calendario muy apretado, llevó a que el Inter se quedara primero sin un segundo título en la final de la US Open Cup y a que se arruinaran las ilusiones de clasificar a la postemporada.