El fútbol en Francia no fue lo que esperaba Lionel Messi para su carrera deportiva. De manera forzosa tuvo que salir en 2021 del Barcelona, donde forjó la mayor parte de su vida, lastimosamente, para terminar yendo al PSG, que hizo la apuesta por él, pero que al final todo terminó mal tras no conseguir los objetivos.

En principio la intención era unirlo con Neymar como las máximas figuras, sumarle el mejor momento de Kylian Mbappé y así, tener junto a otros un equipo temido para la anhelada Champions League. A lo largo de los dos años que estuvo en suelo galo, Messi lo intentó todo por conectar con los aficionados que fueron cambiando su concepto hasta aborrecerlo.

Con eliminaciones de las competencias europeas en rondas previas, el ambiente se empezó a ponerse agresivo a tal punto que la ‘Pulga’, su familia y todos los cercanos a él empezaron a sentir que ya no eran bien recibidos. Durante los últimos días de la campaña, que recién acabó, se vieron cánticos en su contra muy ofensivos.

En medio de su pase al Inter de Miami, se conoció que el argentino cuenta con algunas propiedades de lujo en Estados Unidos. | Foto: 2023 Jean Catuffe

En total 75 partidos disputados, 32 goles marcados y 34 asistencias, números impresionantes, no fueron suficientes para una afición que lo cansó a tal punto de hacerlo tomar rumbo hacia otro liga. La elección de Messi, a los 35 años, fue partir al balompié de los Estados Unidos y vestir la camiseta del Inter de Miami.

Días después del boom que generó su salida de Europa, el jugador se ha abierto para hablar del ‘trago amargo’ que fue estar en París. Además de esto, en una conversación exclusiva con BeIN Sport el rosarino se mostró muy sincero sobre los episodios que terminaron desencadenando el desencanto por Francia.

Desde el principio de sus declaraciones, Lionel contó que su ida a PSG fue netamente por la comodidad de ver que tenía cercanos allí y esto le podría permitir una adaptación más sencilla: “Vine a París porque me gustaba el club, porque tenía amigos y mucha gente conocida dentro del vestuario, compañeros de selección o algunos que ya había tenido...”.

Lionel Messi debutará el próximo mes con la camiseta de su nuevo equipo. | Foto: AFP or licensors

“Me parecía que, más allá de lo que era el club, iba a tener una adaptación mucha sencilla que en otros equipos a los que pudiera haber ido, por lo que fue un poco por eso por lo que decidí ir al club”, agregó, mostrándose en cierta medida algo frustrado por no haber alcanzado los objetivos trazados allí.

“La verdad que sí fue una adaptación muy difícil, mucho más de lo que esperaba. Más allá de que tenía gente conocida en el vestuario y tenía relación con ellos, fue complicada la adaptación a un nuevo cambio. Llegué tarde, no tuve pretemporada. Tuve que adaptarme a una nueva ciudad difícil para mi familia y para mí... Fue complicado”, complementó.

Como en toda relación que genera ilusión, Messi creyó que allí triunfaría, pero el tiempo le mostró otra cosa: “Creo que el recibimiento fue muy bonito al comienzo. Lo dije. Después, la gente empezó a tratarme diferente, una parte del público del PSG, el resto y la mayoría me seguía tratando como al inicio. Hubo un quiebre con la afición del PSG”.

Lionel Messi y Neymar durante la celebración del título de la Ligue 1 | Foto: AFP

Finalmente, intentando hacerse cargo de lo sucedido, dijo que su ciclo terminó en los mejores términos: “No fue mi intención ni mucho menos generar ese quiebre. También pasó con Neymar o Mbappé anteriormente. Me quedo con toda la gente que sí me respetó como yo siempre respeté a todo el mundo desde que llegué y fue una anécdota”.