Romain Molina, periodista de The Guardian y coautor de una investigación de presuntos casos de abuso sexual en el fútbol mundial, ha descrito este jueves más detalles sobre lo expuesto en días pasados y que sirvió para que se diera a conocer que el máximo ente del fútbol (Fifa), estaría investigando a dos de los árbitros que tuvieron paso por el fútbol colombiano.
En su Comité de Ética, están investigando graves denuncias de posible acoso y abuso sexual por parte de Óscar Julián Ruiz e Ímer Machado.
“El caso fue archivado por la Fiscalía hace años, pero ahora se han presentado nuevas evidencias, piden el desarchivo de esos documentos. Hablamos de 11 víctimas y más de 40 testigos en el caso de Óscar Julián Ruiz, y en el caso de Ímer Machado son más de 14 testigos. En Machado no hablamos de menores, en Ruiz hay menores entre las víctimas”, aseguró.
“Son sólidas las acusaciones, sobre todo está la confirmación de gente que vio lo que pasó, no creo que tanta gente, de todos lados y en todos esos años...”, añadió.
“Tengo toda la evidencia, la primera vez que intenté leerlo no pude terminar, es tan horrible que fue un poco complicado. Los detalles son asquerosos, y mucha gente confirma eso. Iban a fiestas, emborrachaban a la gente y se aprovechaban de ellos. Hay conversaciones de otros árbitros que confirman lo que pasó con Hárold Perilla, hoy está en manos de la Fiscalía”, dijo.
“El caso en Colombia es uno de los más graves y más sólidos que he visto en mi vida, no sé por qué la Fiscalía lo ha archivado, nunca han dicho que ellos no lo han hecho”, reiteró.
Perilla, inconforme con su salida del FPC
Con la investigación encaminada, SEMANA habló el martes 10 de mayo con el principal denunciante, Hárold Perilla, quien se refirió a la importancia de la reapertura al seguimiento del caso y denunció las injusticias por las que tuvo que salir del fútbol profesional colombiano hace pocas temporadas.
Perilla, disgustado por la presente situación que aún no se resuelve, también insistió en el bajo nivel que desempeña siendo juez Nicolás Gallo, quien debutó en Colombia en el Torneo Clausura de la Primera A de 2011, y quien, según Hárold, ha tenido privilegios por la relación cercana que ha tenido con Ruiz.
“A mí me sacaron de Fifa cuando estaba ocupando el segundo lugar y le entregaron mi escarapela al señor Nicolás Gallo, que todo el mundo conoce su nivel arbitral y que estaba en el puesto 16, que tenía como 9 o 10 fechas de sanción; entonces, esto es un claro tráfico de influencias”, manifestó a modo de reclamo Perilla por la permanencia de Gallo en el FPC.
Además de lo mencionado, Hárold Perilla advierte que hay árbitros en la actualidad que están pitando a nivel profesional y no deberían estar ahí por las malas actuaciones que han desempeñado en diferentes partidos.
“El caso de Gallo es personal. Cuando me quitaron la escarapela se la dieron él y me dediqué a hacerle una investigación y me di cuenta de que estaba sancionado, que tenía malas notas, y no tenían por qué quitarme la escarapela internacional”, volvió a puntualizar Perilla.
Es indudable el inconformismo que presenta este exárbitro, quien manifiesta que Nicolás Gallo no tiene ningún mérito para dirigir partidos oficiales y que en pocas palabras le quitó el lugar a Perilla de manera injusta, ya que su manera de impartir orden en el terreno de juego no es buena.
A pesar de que Hárold también presentó estas acusaciones contra Ruiz y Machado ante la Federación Colombiana de Fútbol, los dirigentes de ese organismo le ofrecieron volver al fútbol profesional y llevar la cuestión a nivel interno de la FCF para no exponer públicamente la situación; no obstante, Perilla dio una respuesta negativa.