El técnico Marcelo Bielsa estalló en contra de la organización de la Copa América, que se está jugando en Estados Unidos, tras el incidente de violencia ocurrido en el partido de las semifinales que la Selección Colombia le ganó por 1-0 a Uruguay.
Tras el pitazo final, en una de las tribunas del Bank of America Stadium, hinchas de las dos escuadras se fueron a los insultos y a los puños. Pocos minutos después, jugadores como Darwin Núñez, Ronald Araújo y Rodrigo Bentancur fueron hasta el sitio y se unieron a la pelea. José María Jiménez dijo posteriormente que todo se presentó porque supuestamente fanáticos colombianos agredieron a sus familiares.
La polémica no baja. Ahora el que se despachó fue Bielsa lanzando duros dardos a los organizadores del torneo y defendió la forma en la que reaccionaron sus futbolistas. El entrenador argentino recordó el llamado Fifagate y aseguró que Estados Unidos lo creó con ayuda del FBI cuando sintió que “sus intereses estaban siendo atacados”.
“Acá no pasó nada, esto fue una fiesta extraordinaria: estadio lleno, gran competitividad, arbitraje que permitió. No hay nada de lo que quejarse, lo que no se puede hacer es seguir engañando de que las canchas están perfectas. Hicieron una conferencia de prensa para mentir explícitamente”, comentó en la rueda de prensa previa al partido contra Canadá por el tercer puesto del torneo.
El técnico aseguró que cuenta con una colección de fotos que muestran el mal estado en el que se encuentran los campos de juego y, además, confesó que en muchas oportunidades salieron personas en los lugares de entrenamiento y les pidieron disculpas por la forma en la que estaban. “Como eso afecta a los organizadores, no hay que decir una palabra (...) Los jugadores no pueden hablar, todos amenazados”, dijo.
Bielsa cuestionó que los deportistas uruguayos puedan llegar a ser sancionados, señalando que la organización debería salir a pedir disculpas. “¿Los van a suspender? Pero pídanles perdón. Lo único que tienen que hacer es decir: ‘cometimos tales errores, somos los responsables y nos hacemos cargo’, así se termina”, señaló.
Luego, el experimentado director técnico no se guardó nada para decir que están, “entre comillas”, en el país de la seguridad. “Estamos en Estados Unidos, entre comillas el país de la seguridad. ¿Cómo no vas a defender a tu madre, hermana, a un bebé? Si los jugadores no hacían eso hubieran sido condenados”, indicó sin rodeos.
El estratega argentino apuntó a quienes, desde su perspectiva, deberían sancionar y lanzó duro respaldo a los deportistas. “La sanción no es para los futbolistas, sino para aquellos que los obligaron a actuar de ese modo. No tenían opción, los dejaron sin opción y resulta que hay que ver si le tenemos que tener miedo a las posibles acciones”, expresó muy molesto.
“Todo esto es una caza de brujas (...) Todo es una vergüenza, en un país que como organizador tiene responsabilidad. Y en un país que fue capaz del Fifagate, ahora resulta que toca echarles la culpa a los jugadores, ¿en dónde se ha visto esto? Yo he pasado por situaciones muchísimo más graves que esta y las conozco a la perfección”, manifestó.
Bielsa sostuvo que no acepta que “condenen” a los jugadores y finalizó la rueda de prensa diciendo: “Y yo sé una cosa, esta exaltación me quita la razón”.