En Estados Unidos, la industria de los coleccionables deportivos está estimada en más de 1,5 billones de dólares al año. Cada camiseta, balón, botella de agua, zapatos que se usan en los eventos sube su cotización y se convierten en objetos anhelados por los fanáticos que quiere tener un pedazo de historia de los triunfos de su equipo favorito.A la hora de elegir el suceso deportivo más importante del año no queda ninguna duda que el Super Bowl es el top en Estados Unidos, por eso objetos relacionados con este partido se vuelven piezas de culto y hasta de museo que los más convulsionados coleccionistas buscan tener en sus valiosos objetos personales.En la más reciente versión de este encuentro se extravió la camiseta de Tom Brady, uno de los mejores jugadores de la historia, que en este partido obtuvo su quinto título de la NFL con los Patriotas de Nueva Inglaterra. Inclusive se presentó el video del momento exacto en el que el mariscal se da cuenta de la pérdida que se produjo mientras se daban los exaltados festejos.
Fue tal el enfado del jugador que al día siguiente del partido convocó una rueda de prensa para dar a conocer el robo a la opinión pública y exigir la ayuda de las autoridades para recuperar su pertenencia.En contexto: Patriotas ganan un Super Bowl de películaMuchas fueron las versiones que rodearon el hecho. Se planteó desde un posible robo, que la camiseta se había empacado en uno de los camiones del equipo o que simplemente, Brady la mantenía en su poder pero no recordaba en dónde.Sin embargo, la policía de Houston inició una intensa búsqueda para encontrar el preciado ‘jersey’ que de acuerdo a Josh Evans, fundador y dueño de lelands.com, una página de subastas deportivas que vendió una camiseta de Babe Ruth por una cifra récord de 4,5 millones de dólares, la prenda de Brady podría avaluarse en medio millón de dólares en el mercado negro si llegaba a comprobarse su autenticidad.Inclusive el gobernador del estado de Texas, Dan Patrick, pidió a las fuerzas policiales de su estado que la búsqueda fuera una prioridad y que se hiciera lo necesario para encontrar el objeto.El caso trascendió al FBI que con su numeroso y experimentado cuerpo de investigadores fue recopilando evidencia que apuntó a Ciudad de México, pero ¿Cómo podía haber llegado esta pieza de poliéster a la Capital mexicana?Muchos son los periodistas manitos que asisten cada año a cubrir este evento. La pasión por el fútbol americano en México es desbordada y este deporte es considerado el segundo en importancia después del fútbol (soccer, como le llaman los gringos).Los videos del día del partido fueron la pista principal que siguieron los peritos. La actitud de un hombre con una acreditación acaparó todas las miradas. El señalado era Mauricio Ortega, director del periódico La Prensa, un diario que circula en la capital mexicana.Cuando la policía local reviso el domicilio de la hija Ortega no solo encontró el jersey de Brady del Super Bowl 51 sino que también se sorprendieron al descubrir que también estaba la camiseta que el mariscal utilizó en el Super Bow 49.Como si fuera poco entre las pertenencias del periodista también se encontró el casco y lo zapatos de Von Miller, jugador de los Broncos de Denver que había ganado el premio como jugador más valioso del Super Tazón 50.Recomendamos: Los mejores comerciales del SUPERBOWLAl parecer, el periodista tenía la costumbre de aprovechar su posición para ingresar a los camerinos y beneficiarse de la algarabía de la celebración del triunfo para quedarse con varios objetos que luego terminaban en su colección personal.
Ortega había renunciado a su cargo como director de La Prensa, la semana anterior al cateo pero no fue capturado debido a que ni Brady ni la NFL presentaron cargos. Sin embargo, la policía de Houston no cerró el caso, por lo que en caso de pedirlo, Ortega sería detenido para ser extraditado para declarar sobre el hurto. Los coleccionables fueron enviados a los Estados Unidos para comprobar su autenticidad y ser devueltos a sus respectivos dueños. Y la noticia estuvo en las primeras planas de los diarios de ambos paises, los mexicanos reprochando su ‘colega‘ y los americanos contando la historia.Puede ver: Así fue el increíble espectáculo de Lady Gaga en el Super BowlLa situación tuvo tanto impacto que hasta el vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer, la tuvo entre uno de sus temas de discusión en una de sus tradicionales ruedas de prensa matutinas.
El portavoz de Trump dijo: “Estoy feliz que el individuo de la prensa que tomó la camiseta la haya devuelto otro mal ejemplo de la prensa, pero corregimos esa falla”.