Lionel Messi debutó este martes en el Mundial de Qatar 2022, jugando así su primer partido en la que es su quinta participación en la Copa del Mundo, luego de estar en Alemania 2006, Sudáfrica 2010, Brasil 2014 y Rusia 2018.
Para sorpresa de él y para el mundo del fútbol, Arabia Saudita le puso fin al invicto de la albiceleste, que no perdía desde las semifinales de la Copa América de 2019, el 2 de julio de ese año, cuando fue eliminada por Brasil. Desde ese entonces, sumaba 36 partidos sin conocer la derrota, algo que terminó sorpresivamente este martes 22 de noviembre en su debut en el Mundial de Qatar 2022.
El récord histórico entre las selecciones lo sigue manteniendo Italia, que entre 2018 y 2021 llegó a 37 juegos sin perder.
Pese a la derrota, Messi debutó con anotación en la edición número 22 del Mundial. Desde el punto penal, el atacante de 35 años llegó a siete goles en los cinco Mundiales que ha disputado. Como dato, en la única Copa del Mundo que no marcó fue en Sudáfrica 2010, en la que disputó cinco partidos de los 20 que lleva en la actualidad.
Después del partido, cuando pasaba por la zona mixta, Messi se detuvo para atender a los medios de comunicación y dijo que sabían que “Arabia es un equipo con buenos jugadores, que mueve bien la pelota y que adelanta mucho la línea”. “Lo trabajamos, pero nos aceleramos un poco”.
“No hay excusas. Vamos a estar más unidos que nunca. Este grupo es fuerte y lo ha demostrado. Es una situación que hace mucho tiempo no nos tocaba pasar. Ahora hay que demostrar que este es un grupo de verdad”, agregó.
Para Messi este es “un golpe muy duro para todos”, porque no esperaban “empezar de esta manera” el Mundial de Qatar 2022. “Por algo pasan las cosas. Hay que preparar lo que viene, tenemos que ganar o ganar y depende de nosotros”, aseguró.
Además, el jugador del PSG aprovechó para asegurar que está “bien” físicamente y el tobillo, que parecía inflamado en fotos de la prensa, no le está afectado su desempeño en la Copa del Mundo.
Desarrollo del partido
Apenas iniciado el partido, el 10 de la albiceleste tuvo una oportunidad clara de gol, pero el arquero Mohammed Al-Owais empezó a mostrar sus capacidades para mantener el arco en ceros. Messi intentó ubicar el balón al palo derecho, pero el guardameta se estiró para mandar el esférico al tiro de esquina.
El juego transcurría con normalidad, pero al minuto 7, cuando Argentina se disponía a cobrar un tiro de esquina, el juez central del partido recibió un llamado desde los asistentes de VAR para revisar un posible penalti.
Tras hacer la respectiva revisión por una sujeción dentro del área sobre Rodrigo De Paul, el árbitro decidió pitar penalti a favor de la albiceleste. El encargado del cobro fue el 10, quien mandó el balón al fondo de la red.
Al minuto 22, un fuera de lugar le ahogó el segundo grito de gol a Messi, quien definió con perfección en el mano a mano, pero el juez de línea levantó el banderín.
Ya en la segunda mitad, apenas iniciando la reanudación y en cinco minutos, Arabia Saudita sorprendió al mundo y a los argentinos porque se fue arriba en el marcador. Al 48, Saleh Al-Shehri supo aprovechar un balón que llegó hasta el área para desestabilizar al Cuti Romero y vencer con un remate a Emiliano Martínez.
Y apenas cinco minutos después, al 53′, Salem Al-Dawsari le dio vuelta al marcador con un verdadero golazo que enmudeció a los aficionados argentinos y dejó estupefactos a los jugadores de la albiceleste.