El exinternacional alemán Mesut Özil, actualmente jugador del club turco Basaksehir, anunció este miércoles su retirada como futbolista a los 34 años. “Después de una madura reflexión, anuncio mi retirada inmediata del fútbol profesional”, indicó en redes sociales el campeón mundial con Alemania en Brasil 2014.
“Estos últimos meses y las últimas semanas, después de haber sufrido varias lesiones, ha ido quedando cada vez más claro para mí que era hora de abandonar este gran mundo del fútbol”, añadió Özil.
El exjugador de Werder Bremen, Real Madrid y Arsenal no ha tenido unos últimos años fáciles. En julio se había comprometido con el Basaksehir por una temporada, tras una etapa delicada en el Fenerbahçe, uno de los grandes de Turquía.
Había llegado a Estambul a principios de 2021 y el número 10 había sido excluido en marzo de 2022 del primer equipo del Fenerbahçe tras entrar en conflicto con los responsables del equipo. Özil había terminado ya con grandes problemas su anterior etapa en el Arsenal.
El jugador, que inició su carrera profesional en la Bundesliga con el Schalke 04, había sido fuertemente criticado en Alemania después de haber posado en una fotografía con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en mayo de 2018, poco antes del Mundial de Rusia 2018. Özil denunció entonces ser víctima de ataques que consideró “racistas” y anunció su retirada de la selección alemana después de este Mundial de 2018, en el que Alemania fue eliminada en la fase de grupos.
Durante mucho tiempo, Özil, nacido en Gelsenkirchen y de orígenes familiares turcos, fue considerado un ejemplo de integración mediante el deporte, pero lo ocurrido en ese 2018 marcó un antes y un después para un jugador que vistió en 92 ocasiones la camiseta de Alemania, para la que firmó 23 tantos.
Llegó a afirmar que sentía que el presidente de la Federación Alemana de Fútbol le consideraba alemán cuando el equipo ganaba, pero “un inmigrante cuando perdemos”.
El caso de Mesut Özil provocó un enorme debate sobre el racismo en Alemania, donde vive la mayor comunidad turca fuera de su país. Varios ministros turcos aplaudieron la decisión de Özil de dejar su selección y uno de ellos llegó a decir que había “marcado un gol contra el virus del fascismo”.
Özil se casó en 2019 en Estambul con Amine Gülse, que había sido Miss Turquía y entre los invitados a la ceremonia estuvo presidente Erdogan, gesto que terminó por complicar la relación con el pueblo alemán.
Las lesiones: la razón de su retiro
“Ha sido un viaje increíble, lleno de momentos y emociones inolvidables. Quiero dar las gracias a mis clubes: Schalke 04, Werder Bremen, Real Madrid, Arsenal FC, Fenerbahçe, Basaksehir y a los entrenadores que me apoyaron, además de compañeros de equipo que se han hecho amigos”, escribió el volante en su comunicado, recalcando lo hecho en una carrera llena de logros que llegó a su cúspide con la camiseta del cuadro merengue, misma que vistió hasta un año antes de salir campeón del mundo.
En 2013, Özil se despidió del Real Madrid con destino al Arsenal, donde dio grandes destellos de su calidad hasta que las lesiones se lo permitieron. Tras la llegada de Mikel Arteta al banquillo gunner, el alemán perdió todo protagonismo y terminó siendo objeto de polémica por su decisión de continuar en el equipo, aunque sabía de sobra que no tendría minutos.
Al final esa falta de continuidad lo llevó a terminar su contrato y salir libre hacia Turquía, donde vivió los últimos dos años de una carrera que pintaba para mucho más, pero se vio empañada por los problemas físicos y las controversias que estuvieron a la orden del día.
Con información de la AFP.