Este jueves 3 de febrero, la selección de Egipto, dirigida por el extécnico de la Selección Colombia Carlos Queiroz, logró avanzar a la final de la Copa Africana de Naciones después de dejar en el camino a la poderosa Camerún.

El técnico portugués, quien vivió un penoso episodio durante los noventa minutos al salir expulsado por airados comentarios en contra del juez de la contienda, se alzó en el olimpo y buscará su primer título en su era con Egipto.

Los dirigidos por el luso no pasaron del empate a cero en los noventa minutos, dejando todo a la suerte en los penales, vía donde se hicieron fuertes y vencieron a su rival por un marcador de 3-1.

Ahora el DT tendrá la última prueba ante Senegal, selección que dejó en semifinales de la Copa Africana a Burkina Faso. Este juego se llevará a cabo el día domingo a las 2:00 p. m. hora colombiana.

Paso sufrido

El partido era el primero en disputarse en el estadio Olembé de Yaundé desde la tragedia vivida en los octavos de final, cuando hubo una avalancha humana en una de las puertas de acceso al recinto que causó ocho muertes con motivo del duelo entre Camerún y Comoras.

El estadio, con capacidad para 60.000 personas, estuvo ocupado en menos de la mitad de su capacidad en esta ocasión, con 24.371 hinchas en la grada según la cifra oficial facilitada por los organizadores.

Cada equipo tuvo una ocasión clarísima en esos noventa primeros minutos, un remate de cabeza del camerunés Michael Ngadeu (18) y un cara a cara del egipcio Mohamed Salah (56), perdido ante André Onana.

Salah no hizo su mejor partido y por momentos estuvo desaparecido. Funcionó a la perfección el plan del seleccionador portugués de Camerún, Toni Conceiçao, que puso a Tolo Nouhou para seguirle muy de cerca.

No fue suficiente para la victoria camerunesa y la decepción se adueño de la hinchada local, a la vez que Egipto empezó ya a pensar en la final del domingo ante Senegal.

¿Cómo llega su rival?

Senegal se clasificó para la final de la Copa de África de Naciones (CAN) tras derrotar 3-1 a Burkina Faso, este miércoles en la primera semifinal del torneo disputada en la capital camerunesa Yaundé.

Los jugadores del PSG Abdou Diallo (70) e Idrissa Gana Gueye (75) y la estrella del Liverpool Sadio Mané (87) anotaron los goles que llevan a Senegal a la final, que disputará el domingo contra Egipto mientras que Blati Touré (82) logró el tanto del honor para los burkineses.

Vale anotar que Senegal disputará de esta manera su tercera final de la Copa de África, un torneo que nunca ha ganado.

Curiosamente el seleccionador Aliou Cissé ha estado presente en las tres ocasiones, la primera como jugador (y derrota contra Camerún en los penales) y las dos siguientes como técnico: 2019 (derrota 1-0 frente a Argelia) y 2022.

Tras más de una hora de juego igualado, abrió el marcador Diallo tras recibir un pase involuntario del otro central del equipo Kalidou Koulibaly, que había intentado un remate acrobático (minuto 70). Amplió diferencias otro jugador del PSG, Gueye, rematando una gran jugada individual de Mané (75).

Los ‘Potros’ burkineses no se rindieron y lograron reducir el marcador, con un gol de Blati Touré (82), rematando con la rodilla un centro de Bertrand Traoré, pero Senegal ‘mató’ definitivamente el partido con el tanto de Sané cinco minutos después.

La estrella del Liverpool culminó una rápida contra, cuando Burkina Faso estaba volcada buscando el empate, con un balón picado para salvar la salida del portero Farid Ouedraogo.

Con información de la AFP*