El próximo 20 de noviembre inicia uno de los eventos deportivos más importantes para los fanáticos del futbol, el Mundial Catar 2022. Son millones de personas quienes estarán en los estadios del país en Medio Oriente o a través de las diferentes plataformas de transmisión viendo jugar a los astros del balompié. En Latinoamérica, muchos le apuntan a que la Selección de Argentina o Brasil se quede con la copa.
Catar es un país que tiene un buen perfil económico y comercial. Al ser la sede principal del evento de fútbol que con ansias se espera, mucho más después de la pandemia, en menos de cuatro años ha tenido que adaptar su infraestructura y efectuar cambios para recibir próximamente a miles de turistas.
Es por ello que mientras que algunos se preparan para vivir la experiencia sin límites, al territorio del Medio Oriente le ha tocado actuar de manera exprés no solo en la edificación o remodelación de los grandes estadios, sino también en los aeropuertos y carreteras.
Dicho lo anterior, el país anfitrión es el tercero escogido del continente asiático para el mundial organizado por la Fifa, pero a su vez eso representa inversiones económicas de alto nivel. De acuerdo con Statista y recopilaciones de La República, son al menos 220.000 millones de dólares la cantidad gastada para la Copa Mundo, la cual irá hasta el 18 de diciembre.
Los conocedores indican que debido a la gran suma, la inversión se convierte en la más costosa de todos los tiempos. De hecho, si se hace una comparación entre los gastos en Catar con el capital que se necesitó para la Copa Mundo de Alemania en 2006; hay una exorbitante diferencia, ya que en ese tiempo solo se gastaron 4.300 millones de dólares.
No obstante, se da a conocer que para que el mundial de fútbol tuviera de anfitrión a Catar, la inversión del país en construcción de estadios oscila entre los US$ 6.500 millones y los US$ 10.000 millones. Además, la cifra incrementa, pues el Estado soberano tiene una proyección de expansión hasta 2030. Hoteles, metros, estadios, aeropuertos, establecimientos comerciales y más son los proyectos que Catar ya puso en marcha.
Por otro lado, si se compara la inversión con el encuentro deportivo de talla mundial que tuvo sede en Brasil (2014), el país de Sur América ocupa el segundo lugar después de Catar. Statista comparte que la materialización del importante evento del balompié tuvo un costo de 15.000 millones de dólares.
Después, en la lista continúa Rusia (2018) con US $ 11.600 millones, luego Japón (2002) con US $ 7.000 millones y de quinto lugar se ubica Alemania (2006) con US $ 4.300 millones. El citado portal estadístico explica que estos datos no están ajustados a la inflación.
Por ahora, se hacen menos los días para que comience el mundial más costoso de todos los tiempos. A finales de septiembre, se dio a conocer que la vacuna contra la covid-19 no será un requisito obligatorio para los espectadores, aunque sí deberán dar muestra de que la prueba del virus es negativa antes de arribar al país del Medio Oriente, según el Gobierno y el Comité Supremo de Organización.
“Las personas que lleguen a Catar no tienen que implementar una cuarentena, sea cual sea su estado de vacunación o su país de origen”, precisan los organizadores.
En el mostrador de facturación de su aeropuerto de salida, todo visitante de más de seis años de edad, deberá presentar un resultado negativo de menos de 48 horas antes de la hora de salida si es un test PCR, o de menos de 24 horas si es un test de endurecimiento.