Lo ajustado que se ha presentado el calendario del fútbol mundial por la disputa a final del año de la cita orbital, Catar 2022, ha obligado a las diferentes ligas a acelerar su resolución. Una en la que se ha visto que se juega casi cada tres días es la colombiana, que ya marcha en la fecha 12 y perfila a los ocho equipos que disputarán las finales.
Uno de esos equipos que ya tiene que ver con prontitud su ubicación para entrar en la fiesta de las finales, es Independiente Santa Fe, quien recientemente ha dejado puntos importantes por el camino y ya empieza a alarmarse. Durante su más reciente juego, fue una de esas muestras en las que se evidenció que al cuadro bogotano le falta cerrar de buena manera los partidos, luego de que en el juego del pasado viernes ante Bucaramanga, pasara de ganar 0-1 a perder 2-1 en menos de tres minutos.
Dichas desconcentraciones, trajeron el malestar generalizado de los aficionados, los cuales condenaron a varios nombres por haber dejado ir tres puntos vitales. Intentando dar la cara por lo sucedido, este lunes 19 de septiembre, el referente del equipo, Wilson Morelo, utilizó los micrófonos del Vbar Caracol para hacer un análisis de dicho juego y lo que viene para el equipo: “Hicimos un buen partido, lo planteamos bien. Nunca sufrimos el partido, pero nos quedamos cortos en el 1-0″.
A su vez, rescató más aspectos positivos del colectivo y decidió dar menos relevancia al suceso en especial de haber caído en menos de tres minutos: “Habíamos superado al rival en esos 90 minutos, pero es un deporte que está lleno de estas situaciones y hasta que el árbitro no pite no se puede decir nada. El equipo ha venido mejorando, así como jugamos en Bucaramanga vamos a estar más cerca de ganar los partidos que de perderlos”.
También, recalcó el pecado que cometieron en los instantes finales y las indicaciones que no siguieron para que el juego se le fuera de las manos: “Hicimos 92 minutos muy bien, pero en esos dos minutos nos faltó estar concentrados. Se pierde un partido donde el profe toda la semana habló que la única forma de Bucaramanga de hacernos daño era con Dayro (Moreno) y Dayro estuvo siempre controlado, nunca pudo conectar, pero es un goleador, quedaron dos pelotas sucias y nos convirtieron dos goles”.
Restando ahora tan solo ocho juegos, el ídolo y goleador de los rojos envió un mensaje esperanzador a los seguidores: “Ahora pasa por creer en lo que viene, trabajar más duro y comenzar a sumar en esta recta final que va a ser muy importante. De los ocho partidos que restan, cinco son en El Campín, la clasificación la tenemos en casa y hay que afrontar lo que viene”.
Mostrando autocrítica, indicó, que tanto él como el grupo es consciente de que no puede existir una nueva decepción: “Sabemos que Santa Fe tiene la necesidad y la obligación de este torneo clasificar, nadie nos va a perdonar no clasificar este semestre también, sabemos que no estar en esas finales va a ser muy difícil para nosotros”.
Para concluir, casi que se puso en primer lugar para expresar que desde su rol buscará ser protagonista positivo de los ‘cardenales’: “En estos ocho partidos el equipo espera mucho de mí, sé que tengo que darle al equipo lo que espera de mí, que son goles, y soy el primero en alzar la mano y que en los partidos que restan, cae mucha responsabilidad en parte mía y de poder brindar tranquilidad al entorno, al hincha y a mis compañeros, ellos esperan mucho de mí y sé que tengo que hacer más de lo que vengo haciendo”.