El Mundial de Qatar 2022 está cerca de terminarse. La última función del campeonato en Oriente Medio será este domingo 18 de diciembre entre Argentina y Croacia. Por fortuna para el fútbol, queda latente la posibilidad de que Lionel Messi logre la conquista del último título que le queda por alzar en su exitosa carrera y así romper con la sequía de justicia para jugadores de una gran trayectoria deportiva como Cristiano Ronaldo o Neymar que truncaron sus ilusiones durante el año en curso.
Este último, capitán de la selección de Brasil y aún con una edad para probablemente (30 años) disputar la competición de Estados Unidos, Canadá y México en 2026, ha dejado la incógnita sobre la posibilidad de formar parte, ya que previamente dijo que sería su última cita orbital.
Tras su derrota ante Croacia, el llanto de Neymar reflejó fielmente el sentimiento que significaba despedirse de Qatar 2022, más al considerar que se trataba de su despedida de las copas del mundo. “Creo que no. Tenemos que ver lo que pasará en el futuro, pero está claro que no estaré para el próximo Mundial”, dijo en medio de la visible tristeza que lo embargó desde que el lanzamiento de Marquinhos, su compañero en el PSG, se estrelló en el vertical izquierdo.
“Difícil, difícil encontrar palabras para consolarnos en este momento. Hay que intentar encontrar fuerzas para seguir, por más que sea difícil. Algunos se quedarán, otros a ver, pero espero que se dejen cosas importantes para que estos niños puedan seguir”, agregó el 10.
Sin embargo, en los últimos días informaciones que surgieron desde territorio brasileño demostraron que su decaimiento por haber salido de manera temprana de Qatar 2022 fue algo temporal, pues en su casa de São Paulo, al regresar a su país, albergó una sonora fiesta junto a algunos compañeros con los que estuvo días antes en suelo mundialista. Según el medio Planeta do Futebol de Gossipinha, dijo que “algunos jugadores de la selección brasileña ya regresaron a Brasil y realizaron una fiesta en la casa de la familia de Neymar en São Paulo”.
A la par de esto, en un video que aparece sin mostrar muchos más detalles se pudo ver a João Gomes y el jugador Antony, captados por estos mismos medios. Entre otras versiones recogidas por la prensa, una de las asistentes aseguró que la fiesta “estuvo muy chula, pero sin celular”, pues mantener de manera clandestina la reunión había sido de las condiciones para los asistentes a la casa de la estrella brasileña.
Su mensaje al llegar a Brasil
“Todavía duele mucho la pérdida, estábamos tan cerca, tan cerca. Desafortunadamente o afortunadamente todavía no he aprendido a perder. Las derrotas me hacen más fuerte, pero me duelen mucho y aún no estoy acostumbrado. De todos modos, tenemos que seguir adelante... la vida nos sigue adelante, aunque duela y el dolor tarde en sanar, tenemos que seguir adelante”, escribió en primera medida.
“Una vez más, quiero agradecer al pueblo brasileño su apoyo y afecto. Escuchar de ti que luchamos, entregado hasta el final, reconforta un poco de nuestro dolor. Gracias, Qatar por todo... La copa era hermosa y ella tenía que ser de Brasil para coronarlo todo, pero por el destino de Dios no lo fue. Seguimos... Ahora es apagar la llave, aprovechar a familiares y amigos, recargar energías porque lidiar con esta derrota será muy difícil, aún me duele. ¡MUCHA FE!”, finalizó.