El regreso de Neymar a Arabia Saudita ha estado marcado por problemas personales que se ven reflejados en su rendimiento deportivo. Después que en la prensa brasileña destaparan otro presunto acto de infidelidad contra su prometida Bruna Biancardi, el ‘crack’ no ha vuelto a destacar y en sus gestos desencajados se ha enmarcado la cara del doble golpe sufrido por el Al-Hilal esta semana.
Todo empezó el lunes pasado, cuando Leo Días, reconocido periodista de la farándula brasileña, filtró un video en el que se ve al astro en una fiesta en Barcelona acompañado de dos mujeres diferentes a su novia, con la que está esperando el nacimiento de su segundo hijo.
Neymar Pai, padre de Ney, intentó apagar el fuego hablando directamente con el reportero, sin embargo, lo que hizo fue avivar la polémica que llegó a oídos de la modelo Bruna Biancardi, quien se manifestó en redes sociales.
“Buenas tardes, estoy al tanto de todo lo ocurrido y, una vez más, decepcionada”, escribió a través de Instagram. “En la recta final de mi embarazo, mi foco y mi preocupación se dirigen exclusivamente a mi hija y eso es lo único en lo que voy a pensar en este momento. Agradezco los mensajes de cariño”, comentó la mujer.
Al-Hilal no levanta
Unas horas después de destaparse el escándalo, Neymar saltó al campo para su debut en la Champions League asiática y lo que consiguió fue una nueva decepción, esta vez por su pobre nivel, que hace ruido con lo que dejó ver a principios de este mes volviendo a jugar con la selección de Brasil.
Al-Hilal apenas rescató un empate de local frente al humilde Navbahor de Uzbekistán (1-1), un resultado que no corresponde en nada con la millonaria inversión que hicieron para fichar a Neymar y a otras estrellas del fútbol europeo como Bono, Kalidou Koulibaly, Rubén Neves y Sergej Milinkovic-Savic.
Pero un partido malo lo puede tener cualquiera, o al menos eso pensaron los dirigentes del cuadro árabe, que esperaban recuperar la senda victoriosa este jueves visitando al Damac, equipo que pelea por la permanencia en la zona baja del campeonato.
Al-Hilal llegó como líder único del campeonato y necesitaba ganar para asegurar otra semana más en la punta, sin embargo, se encontró con un partido desastroso de Neymar y un rendimiento por lo bajo del equipo en general, que desencadenó en un sorpresivo empate 1-1.
La noche había empezado bien con el tanto de Malcom a los 9 minutos, pero la magia del equipo se fue apagando y Neymar nunca apareció para encenderla de nuevo. A pesar de eso, al Al-Hilal le bastaba para ganar.
Lo que no tenían en los planes era que casi todas las estrellas fallarían prácticamente al tiempo. Sobre el minuto 68, Nicolae Stanciu remató un tiro libre muy lejano y el balón pasó por encima de una barrera frágil en la que varios se agacharon, incluido el brasileño.
Para rematar, Bono, que en el Mundial fue figura con Marruecos, esta vez falló en su rechazo con las manos y se dejó colar un gol insólito para la igualdad en el partido.
Con este resultado (1-1), Al-Hilal dejó servida la pérdida de la punta a manos del Al Ittihad, que sí cumplió con lo esperado y ganó 2-1 al Al-Fateh con goles de Ngolo Kanté y Romarinho. El equipo en el que actúa Karim Benzema ahora es nuevo líder del campeonato saudí con 18 puntos, uno por encima del que hasta esta fecha era el equipo a vencer.
Jorge Jesús, técnico brasileño del cuadro azul, salió abucheado del estadio y se arriesga a perder su puesto, lo que sería otro golpe de gracia para el pobre Ney.