Días agitados ha vivido el tenista serbio Novak Djokovic luego de que fuera deportado el fin de semana pasado de Australia tras no cumplir las normas de bioseguridad por no estar vacunado.

Y es que a pesar de que el número uno del mundo ya esté por fuera de suelo oceánico después de este escándalo, la polémica sigue en su contra y esta vez una foto fue el detonante. El serbio fue captado por un pasajero de la aeronave sin tapabocas e irrespetando nuevamente los protocolos de bioseguridad, pues cabe anotar que al no estar vacunado es blanco claro del coronavirus.

Claramente las críticas no se hicieron esperar en contra del nueve veces campeón del Australian Open, torneo que para esta edición tendrá nuevo campeón.

Su salida, tras una saga judicial que tuvo en vilo al mundo entero, proyectó una sombra sobre el torneo. En su primer comentario sobre el proceso, la Federación de Tenis de Australia indicó que respetaba la decisión de los tribunales y que esperaba que ahora la atención se centre en la cancha.

“Como familia del tenis australiano, reconocemos que los recientes acontecimientos han sido una distracción importante para todos y lamentamos profundamente el impacto que esto ha tenido en todos los jugadores”, indicó la federación australiana.

“Siempre hay lecciones por aprender y vamos a revisar todos los aspectos de nuestra preparación e implementación para informar sobre nuestra participación, como lo hacemos todos los años”, agregó el organismo.

Además, los organizadores respaldaron la gestión del directivo de la federación, Craig Tiley, frente a las críticas por ser quien le dio la luz verde a Djokovic para viajar a Australia.

El serbio podría afrontar nuevos problemas en lo que resta del año si no se vacuna. | Foto: AFP or licensors

Le cierran las puertas

Han sido semanas de controversia, división y malestar entre muchos de los involucrados, algunos en defensa de ‘Nole’ y otros en contra, buscando levantar la voz de protesta, para casi obligar a que la figura del deporte mundial acepte vacunarse.

La más reciente protagonista en toda esta novela ha sido la marca francesa Lacoste, patrocinador oficial del jugador serbio, que emitió en las últimas horas un comunicado para sentar su posición sobre los múltiples episodios en el que se ha visto envuelto Djokovic.

De manera concisa, la reconocida marca expresó: “En cuanto sea posible contactaremos con Novak Djokovic para revisar los acontecimientos que han marcado su presencia en Australia”.

Por otra parte, fue en vía de las leyes instauradas y entregó un mensaje de apoyo a la organización del Abierto de Australia: “Deseamos a todos un excelente torneo y agradecemos a los organizadores por todos sus esfuerzos para garantizar que el torneo se lleve a cabo en buenas condiciones para los jugadores, el personal y los espectadores”.

Lacoste es uno de los ‘sponsors’ más visibles del mejor tenista del planeta. Su marca es exhibida, con una gran visibilidad, por el jugador en cada torneo. El serbio fue catalogado en 2021 como el deportista número 46 en recibir mayores ingresos, gran parte de ellos por patrocinios. Por esta situación, las marcas que lo acompañan pueden tener reparos con la situación actual del tenista.

Otras marcas importantes que podrían pronunciarse en el futuro al respecto son: los relojes suizos Hublot, la marca de raquetas Head, el fabricante de automóviles Peugeot o el gigante del calzado deportivo japonés Asics, todos aportantes constantes a la imagen del tenista y que le han permitido recibir, durante el año anterior, la considerable suma de 26 millones de euros.