El partido entre Olympiacos y el AEK por la semifinal de la Copa de Grecia, programado para este 1 de marzo, fue aplazado tras una tragedia que conmueve al país: al menos 36 personas perdieron la vida en un duro choque entre trenes.
Al compromiso, por la vuelta de la semifinal, en la que el equipo de James Rodríguez debía remontar un 0-3, el colombiano no fue convocado por una nueva molestia física. De hecho, se ha perdido los dos últimos partidos, uno de ellos el clásico griego, ante el Panathinaikos.
“Tras el derbi con el Panathinaikos por la Stoiximan Super League, es muy probable que James Rodríguez se pierda un segundo gran partido consecutivo. El centrocampista colombiano, que había salido lesionado del partido ante el PAOK en Toumba, tiene dificilísimo alcanzar el encuentro del miércoles ante el AEK por la Copa Novibet de Grecia. Es la segunda semifinal, contra el AEK ganando 3-0 en la primera en el OPAP Arena y siendo el gran favorito para clasificarse”, afirmó un día atrás el medio de comunicación la Gazzetta.
Acerca del aplazamiento del encuentro, el equipo de James Rodríguez se solidarizó con los allegados de las víctimas mortales en redes sociales.
“Toda la familia Olympiakos expresa sus más sinceras condolencias a las familias y allegados de las víctimas de la gran tragedia de Tempi. Nuestros pensamientos y oraciones están con los heridos y sus seres queridos”, publicó el club.
Así mismo, mediante un comunicado de prensa, dio a conocer qué pasará con las entradas ya adquiridas para el encuentro.
“Tras el aplazamiento de los partidos de la Copa Helénica de Novibet, incluido el partido Olympiacos - AEK, debido a la indecible tragedia en Tempi, Olympiacos informa de lo siguiente: Las entradas adquiridas por la afición para el partido Olympiacos - AEK, que estaba previsto para el miércoles, en el Estadio Karaiskakis, se aplicarán normalmente para la nueva fecha del partido”, informó.
El porqué del choque entre trenes en Grecia
Al menos 36 personas murieron y decenas resultaron heridas en Grecia por la colisión entre un tren de pasajeros que viajaba entre Atenas y Tesalónica, y un convoy de mercancías, según un nuevo balance difundido el miércoles por el servicio de bomberos.
El jefe de la estación de Lárisa, la ciudad del centro del país donde se produjo el accidente, fue detenido este miércoles, informó a AFP una fuente policial.
El tren de pasajeros transportaba 342 personas y ambos convoyes llevaban “varios kilómetros” circulando por la misma vía por una razón todavía desconocida, indicó el portavoz del gobierno Yiannis Oikonomou.
El portavoz de los bomberos griegos, Vassilis Vathrakogiannis, informó que el número de fallecidos aumentó a 36 y precisó que la operación para rescatar pasajeros todavía está en marcha.
Además, “66 personas fueron hospitalizadas, seis de ellas en cuidados intensivos”, agregó.
Por la violencia del choque ocurrido sobre la medianoche, las locomotoras y los vagones delanteros quedaron pulverizados y los dos conductores murieron de forma instantánea.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, transmitió sus condolencias a través de Twitter. “Conmocionado por las noticias y las imágenes de la colisión de los dos trenes”, escribió en griego. Según los medios del país, se trata del “peor accidente ferroviario que haya conocido Grecia”.
Ningún sistema de seguridad
El presidente del sindicato de conductores de trenes OSE, Kostas Genidounias, llegó al lugar del accidente y señaló la falta de seguridad en esta línea que une a las dos principales ciudades griegas.
“Toda (la señalización) se hace de forma manual. Desde el año 2000 los sistemas no funcionan”, se quejó a la cadena Ert.
El gobierno organizó una reunión de crisis tras el suceso y el primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, acudió al lugar del choque. Se decretó un duelo nacional de tres días.
Con información de AFP*