A tres semanas de Roland Garros, Rafa Nadal se declaró baja también para el torneo de Roma (12-21 de mayo), la última gran cita antes del Grand Slam parisino, donde el veterano jugador español espera estar para defender el título.
La lesión tenaz en su cadera ha impedido a Nadal jugar en tierra batida esta temporada, donde renunció a citas emblemáticas para él como Montecarlo, Barcelona, Madrid y ahora Roma, un torneo en el que fue campeón en diez ocasiones -la última de ellas en 2021-.
“Siento mucho anunciar que no voy a poder estar en Roma. Todos sabéis cuánto me duele perderme otro de los torneos que han marcado mi carrera profesional y personal por todo el cariño y el apoyo de los tifosi italianos”, dice Nadal en un mensaje publicado en sus redes sociales.
“A pesar de haber notado una mejoría estos últimos días, son muchos meses sin haber podido entrenar a un nivel alto y el proceso de readaptación tiene sus tiempos, no me queda más remedio que aceptarlos y seguir trabajando”, añadió.
El tenista ganador de 22 torneos del Grand Slam, que tiene 36 años -cumplirá 37 el 3 de junio-, tiene como misión poder estar presente en su torneo favorito, Roland Garros, una cita que ganó en catorce ocasiones y que este año arranca el 28 de mayo.
La presencia de Nadal en París, o el estado exacto en el que llegaría, es ahora la principal incógnita.
En 2022, Nadal ya pudo ganar en la tierra batida francesa pese a jugar con problemas en el pie izquierdo, donde sufre dolores desde su juventud por el síndrome de Müller-Weiss.
El mallorquín se dañó un músculo, el iliopsoas de la pierna izquierda, durante el Abierto de Australia de enero, en el que se despidió en segunda ronda ante el estadounidense Mackenzie McDonald. Inicialmente, la lesión le iba a tener apartado de seis a ocho semanas, pero el tiempo de recuperación se ha ido alargando.
Cuando a mediados de abril anunció su baja para el torneo de Madrid, que está actualmente disputándose, Nadal ya admitió que “la evolución no ha sido la que en principio” se esperaba.
Los meses de baja en este 2023 le han hecho bajar al 14º puesto de la ATP. El pasado 20 de marzo salió del ‘Top 10′ del ranking por primera vez desde abril de 2005.
España, en buenas manos
El español Carlos Alcaraz, número dos mundial y defensor del título, se regaló a sí mismo una nueva final en el Masters 1000 de Madrid, gracias a su victoria este viernes en semifinales sobre el croata Borna Coric (20º) por 6-4 y 6-3.
Fue en el día en el que el joven murciano cumplía 20 años, algo que pudo celebrar de manera perfecta en una Caja Mágica rendida a su nuevo ídolo.
El domingo, en el partido por el título, Alcaraz tendrá un adversario, en cualquier caso inesperado, ya que saldrá de la semifinal que disputan este viernes el alemán Jan-Lennard Struff (65º) y el ruso Aslan Karatsev (121º).
Alcaraz, pupilo de Juan Carlos Ferrero, se perdió el Abierto de Australia a principios de año por lesión y solo pudo iniciar su temporada en febrero. En la capital española aspira a su cuarto título de 2023, después de los logrados en Buenos Aires, Indian Wells y Barcelona.
En tierra batida acaba de obtener su 18ª victoria del año en 19 partidos disputados, un balance prometedor a tres semanas de Roland Garros (28 mayo-11 junio).
Si revalida su título en Madrid, Alcaraz solo tendría que jugar un partido en Roma la próxima semana para reinstalarse de nuevo en el número 1 de la clasificación mundial, en detrimento del serbio Novak Djokovic.
El pasado septiembre, ‘Carlitos’ se había convertido en el número uno más joven de la historia tras ganar su primer título del Grand Slam, el Abierto de Estados Unidos.
Con información en la AFP.