El canadiense Denis Shapovalov, decimocuarto de la clasificación ATP, dio la sorpresa del Australian Open al derrotar este domingo en octavos al tercer jugador mundial, el alemán Alexander Zverev, uno de los candidatos al título, y será el rival en cuartos de un Rafael Nadal impresionante, quien ganó sin problemas al francés Adrian Mannarino.
Nadal, veinte veces campeón de ‘Grand Slam’, que busca un 21.º título que le colocaría en solitario con el récord de triunfos en torneos mayores, solo pasó apuros en el primer set, en el que tuvo que jugar tie-break de 28 minutos, para imponerse por 7-6 (16/14), 6-2 y 6-2.
“El primer set fue desgastante a nivel de nervios. Tuve un poco de suerte al final del ‘tie-break’”, dijo Nadal sobre su partido contra Mannarino, que duró 2 horas y 40 minutos.
“Estoy muy feliz de haber sobrevivido a ese primer set, sin ninguna duda”, añadiendo que haber logrado rápidamente un break en la segunda manga había sido “muy importante”, en el paso definitivo a la victoria.
Es la decimocuarta vez que el tenista español, de 35 años, alcanza los cuartos de final en su decimoséptima participación en Melbourne.
Largo día para Nadal
Bajo un sol plomizo, Mannarino puso las cosas difíciles al español en la primera manga, donde los dos jugadores estuvieron a un gran nivel, en un set que duró 81 minutos.
Durante ese juego decisivo, que duró 28 minutos, Nadal salvó cuatro bolas de set, para concluir en la séptima de la que dispuso el español. Nunca había necesitado tantos puntos (30) para ganar un juego decisivo en el circuito.
Pero si Nadal respondió en octavos, la sorpresa llegó con la derrota del alemán Zverev ante el canadiense Shapovalov, por 6-3, 7-6 (7/5), 6-3. “Llegué (a Australia) con el objetivo de ganar el torneo y convertirme eventualmente en el número uno mundial. Pero si juego así, no lo merezco. Es tan simple como eso”, estimó el alemán, de 23 años, después de perder ante Shapovalov. El alemán había alcanzado las semifinales en Melbourne en 2020 y los cuartos el año pasado.
Por su parte, el canadiense, semifinalista del pasado Wimbledon, que es su mejor resultado en un Grand Slam hasta ahora, nunca había superado la tercera ronda en Melbourne. “Jugué de forma inteligente el partido, que se puso a mi favor rápidamente, y después perdí un poco el control del encuentro. Pero supe luchar para seguir controlando el juego”, comentó el tenista, de 22 años.
En el cuadro femenino, el duelo de cuartos de final entre la estadounidense Madison Keys (51.ª) y la checa Barbora Krejcikova (4.ª) no era el esperado, pero Keys demostró las cualidades que le hicieron alzarse al séptimo puesto mundial en 2016 y a la final del US Open en 2017, para ganar a la española Paula Badosa (6.ª), por 6-3 y 6-1, mientras que la checa, ganadora del último Roland-Garros, se impuso a la doble ganadora bielorrusa de Melbourne, Victoria Azarenka (25.ª), por 6-2 y 6-2.
Victoria de Barty
Por su parte, la número uno mundial, la australiana Ashleigh Barty, superó los octavos al derrotar a la estadounidense Amanda Anisimova (60.ª del mundo), por 6-4 y 6-3.
La australiana, de 25 años, intentará alzarse a semifinales el martes, enfrentándose a otra estadounidense, Jessica Pegula (21.ª), quien derrotó por sorpresa este domingo a la griega María Sákkari (8.ª) por 7-6 (7/0) y 6-3.
Tras haber eliminado a Lesia Tsurenko 6-0 y 6-1 en 54 minutos, Lucia Bronzetti por 6-1 y 6-1 en 52 minutos y Camila Giorgi por 6-2 y 6-3 en 61 minutos, Barty necesitó 1 hora y 14 minutos para vencer a Anisimova.
La última vez que Barty se había enfrentado a su rival de hoy se remonta a la semifinal de Roland-Garros en 2019: la australiana iba perdiendo por 7-6 y 3-0 antes de ganar el partido y su primer título de Grand Slam dos días más tarde.
Ganadora de dos títulos de Grand Slam (Roland-Garros 2019 y Wimbledon 2021), la número uno mundial busca su primer título en Australia. En Melbourne alcanzó las semifinales en 2020 y los cuartos en 2021.
Con información de la AFP.