El Real Madrid se estrenó con victoria en la nueva temporada liguera este sábado al imponerse 2-0 en el campo del Athletic de Bilbao, con el mejor homenaje a su portero Thibaut Courtois tras la grave lesión de rodilla sufrida esta semana.
Los jugadores merengues saltaron al césped de San Mamés con camisetas de apoyo a su compañero, en las que se podía leer “Mucha fuerza Tibo”, quien habrá podido disfrutar desde su casa con los goles de Rodrygo (28) y Jude Bellingham (36).
El inglés, fichaje estrella de los merengues en esta ventana de mercado, fue uno de los grandes referentes en un centro del campo, en el que Carlo Ancelotti dejó de entrada a Luka Modric y Toni Kroos en el banquillo, dando el protagonismo a los jóvenes.
Bellingham fue omnipresente en todos los lugares del campo asistiendo tanto en defensa como llegando con peligro al área contraria, para ayudar a Rodrygo y Vinicius de cara a la portería contraria.
La primera media hora de juego fue un duelo en el centro del campo con dos equipos muy cerrados y muy intensos en la presión, lo que impidió que hubiera grandes ocasiones por ninguno de los dos lados hasta que Rodrygo halló el camino del gol.
El brasileño encontró en un balón suelto en el área para soltar un fuerte disparo al primer palo que sorprendió al portero Unai Simón (28).
El gol llevó al Real Madrid a poner algo de pausa al juego, mientras seguía manteniendo maniatado al Athletic, que en la primera parte no pudo hacer ni un disparo a puerta para alivio de Andriy Lunin, sustituto de Courtois.
El equipo blanco amplió la cuenta cerca del descanso con un tiro poco ortodoxo de Bellingham en el que el balón rebotó en el suelo describiendo una parábola que sorprendió al portero internacional del Athletic (36).
Apenas un minuto antes, Vinicius había logrado hasta la portería vasca pero se encontró con una buena parada de Unai Simón (35).
El Athletic, que en la primera parte apenas dio trabajo a Lunin, dio un paso adelante en el segundo tiempo apretando arriba a un Real Madrid que empezó a pasar algunos apuros y perdió a su muro defensivo Eder Militao.
El central brasileño sufrió una lesión en la rodilla izquierda, que le obligó a abandonar el terreno de juego, siendo sustituido por Antonio Rudiger (50).
El Real Madrid optó por aguantar el acoso local y buscar sus opciones al contraataque con la velocidad de sus hombres de ataque.
Vinicius pudo poner el tercero en un disparo tras tras un combinación con Bellingham, que se topó con Unai Simón (69).
Ancelotti recurrió a la veteranía de Modric y Kroos para gestionar los últimos minutos del encuentro y controlar el balón, frente a un Athletic que no se rindió en ningún momento impulsado por la ruidosa afición local.
El Athletic siguió empujando, pero no lograría revertir el resultado e impedir la primera victoria merengue en esta nueva temporada liguera poniéndose en cabeza de la clasificación.