La UEFA inició otra investigación sobre el árbitro inglés David Coote después de que un video supuestamente mostró que consumió cocaína durante la reciente Eurocopa.
“Se ha nombrado a un inspector de ética y disciplina de la UEFA para evaluar una posible violación de las normativas disciplinarias de la UEFA por parte del árbitro, el señor David Coote”, dijo la UEFA en un comunicado difundido este jueves 14 de noviembre.
Coote trabajó como especialista del VAR durante el Campeonato Europeo de 2024, donde los árbitros se alojaron en un hotel cerca de Fráncfort. Fue asistente apoyando al árbitro principal de VAR en ocho partidos.
El diario británico The Sun publicó un video el miércoles por la noche que parecía mostrar a Coote inhalando el estupefaciente usando un billete estadounidense.
El informe indicó que el incidente fue filmado un día después de la última asignación de Coote en el torneo, el partido entre Francia y Portugal por los cuartos de final. Francia ganó en una tanda de penales después de un empate 0-0.
Coote fue suspendido el pasado lunes por el organismo de árbitros del fútbol inglés después de que circulara un diferente video de celular en el que se le veía haciendo comentarios despectivos con amigos sobre Jürgen Klopp, exentrenador de Liverpool. Ese organismo y la Federación Inglesa de Fútbol iniciaron investigaciones.
La UEFA ya había dado de baja a Coote para la actual fecha internacional este semana después de que se publicara el primer video.
Los partidos en los que participó en la Euro 2024 incluyeron la victoria 2-0 de la anfitriona Alemania sobre Dinamarca en los octavos de final, que incluyó un polémico penal por una mano. El árbitro principal del VAR en ese partido, Stuart Attwell, estuvo involucrado en algunas de las decisiones más controvertidas del torneo.
Otro escándalo sacude al fútbol inglés
Un futbolista de la Premier League fue interrogado el pasado 7 de noviembre acusado de presuntamente violar a tres mujeres y agredir sexualmente a una cuarta, mientras que una quinta persona denunció comportamiento controlador del jugador.
Según publicó la BBC, un futbolista de la Premier League inglesa fue interrogado de nuevo por la Policía, que sigue investigando tres casos de presunta violación y otro de agresión sexual entre 2021 y 2023. Sin embargo, el jugador, del que no se sabe el nombre ni el club al que pertenece, sigue jugando.
La cadena británica informó de que el jugador acudió al interrogatorio en una comisaría el pasado jueves 7 de noviembre y fue interrogado, siendo la primera vez que se le cuestionaba sobre una acusación de violación denunciada el año pasado por una cuarta mujer.
El futbolista fue detenido por primera vez como sospechoso de violación en julio de 2022, a raíz de la denuncia de una mujer, y volvió a ser arrestado poco después por una denuncia anterior de abuso de una segunda mujer, que lo denunció en agosto de 2021. Y el deportista regresó a la comisaría para otro interrogatorio en febrero de 2023, después de que una tercera mujer le denunciara por presunta agresión sexual. El jugador ha negado todos los hechos.
En los testimonios recogidos por la BBC, una de las mujeres confesó que pensó en quitarse la vida al ver la inacción del club, la Premier League y la Federación Inglesa de Fútbol (FA). “No quería vivir en un mundo en el que se me recuerda constantemente que las acusaciones de violación pueden ignorarse siempre que tengas el talento suficiente”, explicó.
“Esta investigación, mi única oportunidad de obtener justicia, me ha agotado física y mentalmente; cuanto más se alarga esta investigación, más se desvanece mi confianza en el sistema”, declaró a la BBC otra mujer que denunció por primera vez al futbolista en agosto de 2021 y sigue esperando el resultado de la investigación policial.
Las víctimas declararon a la BBC el pasado mes de noviembre que el club, la FA y la Premier League dan prioridad a los intereses comerciales sobre la seguridad de las mujeres. Incluso, la investigación de la BBC descubrió que 7 de los 20 clubes de la Premier League han tenido jugadores o empleados investigados por la Policía por delitos sexuales desde 2020.
Además, según lo informado por la cadena británica, una de las denunciantes escribió “desesperada” al club, a la Premier y la FA, pero no mostraron apoyo ni ayuda. El equipo le dijo que no podía hablar de sus acusaciones por motivos legales; la competición la remitió a la FA y esta le aseguró por correo electrónico que no podía tomar “ninguna medida” al no estar contemplado en su reglamento.
La FA defendió que no había “ninguna prueba” que sugiriera que el jugador “supusiera un riesgo de daño para niños o adultos en peligro”. “Se escudaban en su falta de políticas, sabiendo que las normas que habían establecido estaban destinadas a proteger los beneficios, no a las víctimas”, dijo la mujer.
*Con información de AP y Europa Press.