La justicia italiana solicitó este martes la extradición del exdelantero brasileño Robinho, condenado a nueve años de prisión por violación.
En enero, el Tribunal de Casación de Roma rechazó un recurso del exdelantero del Real Madrid y del Manchester City y de Ricardo Falco, amigo del exfutbolista, ambos declarados culpables del caso ocurrido en 2013.
El futbolista y su amigo forman parte de un grupo de seis personas que fueron acusadas de haber participado en una violación grupal a una mujer de 22 años en una discoteca en Milán.
Robinho fue condenado en 2017 con una sentencia de prisión de nueve años, la cual ha apelado en los últimos años. Así mismo, fue condenado a pagar 60.000 euros (73.000 dólares) a la joven, por concepto de daños e intereses.
En marzo de 2021, un Tribunal de Apelación de Milán ratificó la condena de nueve años de prisión. Aunque el internacional con la Selección de Brasil afirmó en reiteradas ocasiones que es inocente, en 2020 confirmó que sí hubo contacto íntimo, pero sin penetración.
“No tuve relación sexual con ella. Tuvimos relación entre hombre y mujer, relaciones que el hombre tiene con la mujer, pero no llegó a haber ninguna relación sexual, ninguna penetración, nada de eso”, expresó en una de sus primeras declaraciones.
Jacopo Gnocchi, el abogado que representa a la víctima, señaló ante la decisión de este martes: “Hemos tenido conocimiento de que el Ministerio Público de Milán ha remitido una solicitud de extradición a las autoridades brasileñas, a través del Ministerio de Justicia. El problema, por lo tanto, se convierte en uno de naturaleza diplomática y política”. “Lo importante es que se haga justicia y que el fallo definitivo se respete”, subrayó.
Pese a la sentencia definitiva, el también exjugador del Manchester City podría salvarse de pagar la condena. “Robinho y Falco no pueden ser extraditados a Italia, ya que la Constitución de 1988 prohíbe la extradición de brasileños”, informó el medio brasileño Globo en enero.
Es más, la condena de nueve años de prisión tampoco se podrá hacer efectiva en territorio brasileño: “El tratado de cooperación judicial en materia penal entre Brasil e Italia, firmado en 1989 y aún vigente, no prevé la aplicación en territorio brasileño de una condena impuesta por la justicia italiana”.
Por eso, la única manera para que Robinho pague los nueve años de prisión es que Italia emita una orden de detención internacional, la que solo se hará efectiva si sale de su país natal y se encuentra en otro que tenga tratado de extradición con la justicia italiana.