La Selección Colombia puede respirar tranquila. James Rodríguez no sufre una lesión grave y puede estar disponible para ser convocado a la próxima doble fecha de eliminatorias de noviembre.
El colombiano encendió todas las alarmas este martes 22 de octubre, luego de retirarse del entrenamiento matutino con el Rayo Vallecano por molestias musculares.
Periodistas presentes en la sede deportiva aseguraron que James sintió un pinchazo en la pierna izquierda y se retiró del campo en compañía de un miembro del cuerpo médico. Aunque intentó probarse con un pequeño trote, prefirió esperar a los exámenes médicos con los que se descartó un desgarro.
Pablo Villa, periodista de Radio Marca, informó sobre los resultados de las pruebas a las que se sometió el capitán de la Selección Colombia. “Las primeras exploraciones realizadas a James Rodríguez confirman que sufre una sobrecarga en los isquios de la pierna izquierda”, indicó en su cuenta de X (antigua Twitter).
Villa añadió que está “descartada” una “rotura muscular” y que su regreso a las canchas tardará dependiendo la evolución de las molestias. Rayo Vallecano juega este sábado, en condición de local, contra Alavés a las 9:30 de la mañana (hora de Colombia) por la fecha 11 de la liga española.
“Precipitado que esté contra el Alavés, pero se probará durante la semana”, agregaron desde España.
James paga caro el esfuerzo
Teniendo en cuenta que James Rodríguez solo jugó 30 minutos contra Mallorca este domingo, el origen de la sobrecarga podría remontarse a los dos partidos de eliminatorias sudamericanas frente a Bolivia y Chile.
Cabe recordar que el cucuteño fue titular en El Alto, a 4150 metros de altura sobre el nivel del mar, y jugó de principio a fin para sorpresa de hinchas y medios de comunicación.
De regreso en Barranquilla, James volvió a ser titular frente a los chilenos y se retiró del campo al minuto 86, dejando su lugar para el ingreso de Juan Fernando Quintero, a quien la afición del Metropolitano estaba pidiendo a gritos.
Luego del compromiso, el capitán admitió estar cansado del esfuerzo hecho en ambos compromisos. “Siempre intento entrenarme bien, cuidarme también. Se está pasando por una buena fase. Hoy, confieso que estoy cansado y ahora espera cuando llegue a Madrid a ver qué”, dijo al aire.
Cuando regresó a España no tuvo problemas para entrar en la convocatoria del Rayo Vallecano y se le vio sonriente en su llegada al estadio Son Moix, donde se reencontró con Johan Mojica, otro de los habituales titulares en el combinado nacional.
James entró al minuto 64 en lugar de Isi Palazón e interactuó con el balón en algunas jugadas por la banda derecha. Desafortunadamente, el Rayo nunca se encontró cómodo en el partido y recibió el baldado de agua fría con el solitario tanto de Vedat Muriqi que sentenció la victoria a favor del elenco local.
Terminado el compromiso, el técnico Íñigo Pérez asumió la responsabilidad de la derrota y James guardó silencio a la espera de convencer a su entrenador de darle minutos en Vallecas para enfrentar al Alavés.
“Efectivamente, cuando se da un partido en el que claramente hay un equipo que supera al otro y que es desde principio hasta el fin, es frustrante. Pero realmente no hay excusas posibles. Han sido mejores, tendremos que analizar el partido con calma y con detalle y a partir de aquí siempre utilizar este tipo de partidos y estas derrotas para mejorar”, dijo el estratega español.
James ahora esperará por el alta médica para volver a entrenamientos. Si no alcanza a estar contra Alavés, su regreso podría ser a mediados de la próxima semana visitando a CD Villamuriel por la primera ronda de la Copa del Rey.