Con más de 26.000 boletas vendidas, Independiente Santa Fe y Deportes Tolima disputaron este sábado 16 de marzo un partido directo por la punta de la tabla de posiciones de la Liga Betplay.
El buen momento del conjunto cardenal y el horario programado por la Dimayor incidieron en la buena afluencia de público al estadio Nemesio Camacho El Campín desde tempranas horas del día.
Lamentablemente, el buen marco en las tribunas se vio empañado por algunos violentos que se enfrentaron en el sector norte del escenario deportivo. Sobre la parte final del primer tiempo, el juego se detuvo por orden del árbitro Wilmar Roldán, quien evidenció los disturbios que se estaban presentando entre hinchas del cuadro pijao, ubicados en la tribuna lateral norte, y los aficionados de Santa Fe que estaban cerca a esa zona en la tribuna oriental general.
Al ver lo que estaba sucediendo, jugadores del Tolima se acercaron a su hinchada y le pidieron que se calmara, mientras la Policía Nacional intervenía para devolver la calma al estadio y capturar a algunos de los responsables.
Según las primeras versiones, todo se dio tras un largo intercambio de insultos entre ambas hinchadas. Antes de detenerse el compromiso, individuos identificados con prendas de Deportes Tolima intentaron saltar la baranda para cruzar a la tribuna oriental. En ese punto, se empezaron a presentar los desmanes.
Los líderes de la barra organizada del elenco vinotinto reaccionaron retirando la bandera que los identificaba, lo que generó aún más confusión entre los aficionados visitantes.
La furia se apoderó de algunos de los hinchas tolimenses, quienes no encontraron otra forma de responder diferente a lanzar objetos contundentes entre botellas, sillas y demás artefactos que encontraban a su paso.
La Policía Nacional reaccionó llamando a los agentes del Esmad, que hicieron presencia desde la parte baja, al tiempo que otros agentes ingresaban a la tribuna norte para capturar a quienes habían armado los disturbios.
Después de unos cinco minutos de parón, el compromiso se reanudó en medio de las tensiones que generó la lamentable situación. Los sujetos que fueron detenidos por las autoridades fueron retirados del estadio y conducidos al puesto de mando unificado (PMU).
La intervención oportuna de la Policía Nacional y el trabajo de los agentes dispuestos por la Alcaldía Mayor permitió que la calma regresara para el desenlace normal del partido que, para ese punto, se encontraba 1-0 a favor del Tolima, con el tanto tempranero de Yeison Guzmán.
La gran preocupación de las autoridades era el ingreso de familias y niños que entraban gratis a El Campín con la compañía de un adulto. Al ser un horario amable para la ciudad, Santa Fe cosechó la mejor asistencia en lo que va del semestre y estuvo acompañado por su afición, que poco a poco ha ido respondiendo a las críticas por las bajas asistencias que se produjeron el año pasado.
Los cardenales venían de vencer a Fortaleza en la fecha anterior y pasan por un momento positivo que se ha visto reflejado en la relación entre la hinchada, el cuerpo técnico y los dirigentes.