El pasado viernes, 30 de agosto, se confirmó el deceso de Javier Acosta, el fiel hincha de Millonarios que logró conmover a Colombia. El joven murió luego de someterse en una clínica privada de Bogotá a la eutanasia, muerte médicamente asistida.
Acosta, que tenía 36 años, salió a las 11:30 de la mañana del Hospital San Ignacio de la Universidad Javeriana, donde fue despedido por miles de seguidores del conjunto azul de la capital colombiana, quienes quisieron expresarle un poco del cariño que sembró en vida.
Antes de llegar al centro médico en el que partió finalmente de este mundo, el bogotano recibió una inesperada videollamada mientras se transportaba en la ambulancia, puesto que tuvo la oportunidad de sostener un emotivo diálogo con David Mackalister Silva, uno de los capitanes del club embajador.
El mediocampista, de igual manera, acompañó a Javier durante sus últimos minutos con vida, quien aprovechó ese especial momento para compartirle al reconocido futbolista que deseaba que Millonarios vuelva a ser campeón este año.
“Parcero, lo que le dije, ahí veremos Dios mediante qué se puede hacer, que el señor lo bendiga, lo proteja. Javi, de verdad que muchas gracias”, expresó Silva, a lo que el joven bogotano le respondió: “Lo último que le quiero decir es que espero que seamos campeones, que luchemos hasta el último minuto. Acuérdese que le confié lo más preciado para mí que es mi hija, mi vida”.
“Me arrepiento”
Pese a su amor incondicional con el equipo azul, Javier Acosta abrió su corazón en un live en su cuenta de Facebook y subió una sentida reflexión sobre haberle dedicado tantos años de vida al barrismo, confesando que ese fue uno de sus más grandes “arrepentimientos”.
En la transmisión, que se hizo viral en las redes sociales, el fanático expresó que muchas veces la barra brava no lo acompañó en los duros momentos que atravesó desde que quedó en silla de ruedas. Sin embargo, en ningún momento se justificó por haber elegido ese estilo de vida.
“No saben lo que me arrepiento de todo el tiempo que le entregue a la barra. Hoy en día, la barra, ni siquiera un mensaje. Tengo 36 años y 21 años han sido dedicados a la barra y a seguir a mi equipo. Por la barra estoy en silla de ruedas, por ella estoy en una cama. Lastimosamente, cuando tú estás bien, dice la canción, tienes amigos a granel, cuando estás en una situación de estas: mamá, papá, hermana, hijo y pare de contar”, indicó inicialmente.
Por último, concluyó: “Sí, estoy en una silla de ruedas y me lo busqué por ser una barra brava y seguir a mi equipo alentándolo a todos lados, porque ese era el lema. Yo no estoy diciendo que me digan que me llevan pañales, plata, comida. No, lo que yo valoro en este momento acá es una visita, un mensaje”.
El bogotano, de igual manera, manifestó en una emotiva entrevista con el programa de Los Impresentables, de Los 40, que no fue un santo y que cometió muchos errores, sobre todo de joven, por estar metido en el mundo del barrismo.