A los 10 minutos del partido entre Colombia e Inglaterra el pasado sábado, la defensora Carolina Arias fue sustituida con grandes muestras de dolor, todo después de haber recibido un golpe involuntario de su compañera Catalina Pérez.
Su lugar en el campo lo tomó Ana María Guzmán y las alarmas en el equipo nacional femenino se encendieron porque la jugadora, que fue contratada hace poco por Independiente Santa Fe, se mostró inconsolable en el banquillo mientras transcurría el primer tiempo.
Las muestras de dolor daban señales de que la lateral derecha, indiscutible como titular de la Tricolor, tenía una grave lesión, algo que se terminó de confirmar en el segundo tiempo, cuando regresó al banquillo en los brazos de uno de los miembros del staff.
Carolina llegó a Colombia la madrugada de este martes, 15 de agosto. Lo hizo en silla de ruedas y fue la primera futbolista en subirse al bus con ayuda de sus compañeras y el personal de logística dispuesto por la Federación Colombiana de Fútbol (FCF).
Minutos después, el entrenador Nelson Abadía habló al respecto con la prensa y confirmó los hallazgos obtenidos a través de los exámenes médicos practicados cuando todavía se encontraban en Sídney. “Es una lesión de ligamento colateral interno producto de un trauma. Le da más o menos para dos semanas y ya estará bien”.
Carolina estará en el evento de homenaje este martes y luego quedará al corriente del departamento médico de Independiente Santa Fe, que la espera con ansias para determinar el proceso de recuperación con la mirada puesta en la Copa Libertadores Femenina, torneo que se jugará en Colombia e inicia el próximo 5 de octubre.
Alerta con el refuerzo de lujo
Los más preocupados con la situación de Arias son los directivos de Santa Fe, que hicieron una importante gestión para sumar a una de las jugadoras más experimentadas del fútbol colombiano.
La defensora vallecaucana llegó después de un paso fugaz por el Junior de Barranquilla para darle un salto de calidad a la muralla santafereña. En el Mundial, por ejemplo, fue parte fundamental del planteamiento de Nelson Abadía, saliendo como titular en los cinco partidos disputados y jugando casi la totalidad de los minutos a excepción del partido de Marruecos en el que salió al 91′ en lugar de Marcela Restrepo y el de Inglaterra por la delicada lesión.
Además del gran papel hecho sobre el campo de juego, Carolina Arias ha destacado por su alegría y la excéntrica manera de celebrar con el público en los estadios de Australia. Contra Alemania y Jamaica, por ejemplo, dejó varias imágenes vistiendo la camiseta del rival de turno, pero con un toque criollo dado por la bandera o por el sombrero ‘vueltiao’ que lució el pasado martes.
Cabe recordar que, con el rótulo de vigentes campeonas, las Leonas llegan a la Libertadores con la intención de aprovechar la localía y conseguir el título que se les escapó en 2021 por aquella dolorosa derrota en la final frente a Corinthians.
Además de Arias, Santa Fe anunció en los últimos días el regreso de la delantera Diana Celis, el acuerdo con la portera Stefany Castaño y la llegada de la experimentada Natalia Gaitán, mundialista con Colombia en 2015 y con paso por el fútbol español en equipos como Valencia y Sevilla.
Después de haber logrado la tercera estrella en casa del América de Cali, el cuerpo técnico de Ómar Ramírez identificó que las principales necesidades estaban en la defensa, razón por la cual decidieron invertir en talento con experiencia y pasado en Selección.
La Copa Libertadores 2023 tendrá como sede a Colombia y las ciudades elegidas fueron Cali, habitual casa de la Tricolor, y Bogotá.
Después del estudio hecho junto a la Conmebol, se determinó Metropolitano de Techo (Bogotá) y Pascual Guerrero (Cali), fueron los escenarios escogidos por la entidad Sudamericana y el comité organizador para que los 16 equipos participantes jueguen los 32 partidos que tiene el calendario de competencia. De los 4 grupos existentes, 2 tendrán de sede la capital del Valle del Cauca y 2 estarán en la capital de la República.