Antes de lo esperado acabó la historia de Teófilo Gutiérrez en el Atlético Bucaramanga. El experimentado jugador, que se pensaba iba a dar un salto de calidad al equipo santadereano, terminó siendo un ‘dolor’ de cabeza para la directiva, que decidió poner por encima a la institución, antes que a un jugador en específico.
Los líos con el jugador iniciaron hace un par de semanas, cuando según el informe de un juez, este lo habría insultado afuera del campo. “Finalizado el juego, en el túnel, cuando me dirigía al camerino arbitral, el jugador del Club Bucaramanga n.° 29, Teófilo Gutiérrez, empleó lenguaje ofensivo e insultante contra mi persona”, fue lo que señaló Bismarks Santiago, árbitro de la contienda entre Bucaramanga y DIM.
Tras ese inconveniente, se supo que la Dimayor le impuso al jugador una sanción que lo dejaba fuera por varias fechas, precisamente en medio de ese tiempo fue que sucedió otro escándalo; para esta oportunidad las versiones volvieron a apuntar a Gutiérrez, quien al parecer habría insultado a un canterano del equipo ‘leopardo’ en el camerino. Esta situación habría terminado de romper la relación de manera unilateral.
Con estos líos encima, sin el atacante aportando para las fechas finales de la liga colombiana y los mencionados inconvenientes extradeportivos, fue que se presagiaba que los altos manos del Atlético Bucaramanga preparaban la pronta salida del jugador de la institución. Y así fue, durante el más reciente fin de semana a través de un comunicado lo hicieron oficial.
“El club Atlético Bucaramanga se permite informar a su afición, medios de comunicación, periodistas y público en general que el jugador Teófilo Gutiérrez terminó su vínculo con la institución después de la finalización de su contrato por mutuo acuerdo”, se lee en la misiva.
Además, le sumaron al texto: “Así pues, agradecemos al jugador su entrega, compromiso y profesionalismo durante su periodo en la institución y le deseamos éxitos en sus futuros proyectos profesionales”.
A la par de lo dicho recientemente por el club, Teo también salió a dar su versión sobre lo que sucedió en el semestre vestido de amarillo: “Bucaramanga me abrió las puertas, lastimosamente no pudo ver la mejor versión mía, bueno la de todos, fue un semestre muy difícil”.
En su conversación con el medio, Zona Libre de Humo, dio a entender que los resultados logrados por el equipo no demostraron en lo absoluto el trabajo que puertas hacia adentro intentaban hacer: “Tienen un buen plantel y grandes jugadores y ojalá pueda demostrar todo su potencial en el semestre que viene”.
Luego de cerrarse el capítulo del equipo santandereano, ahora queda la incógnita de dónde podría seguir su carrera recordando que ya cumplió los 38 años y que para el fútbol de primer nivel, no es que le quede mucho tiempo de vigencia: “Siempre hay especulaciones con mi futuro, por ahora estoy descansando con mi familia, más adelante estaré analizando y que sea un equipo que necesite fútbol”.
El medio caleño, aprovechando tenerle en entrevista, le pidió una opinión sobre la compleja situación que está atravesando el Deportivo Cali, donde administrativa, económica y deportivamente tuvo un semestre para el olvido: “Es algo especial por su gente y su hinchada, es una gran institución, ha sido un año muy difícil para el club en todo sentido. Administrativamente ellos sabrán en qué se han equivocado”.
Finalmente, en estos momentos el torneo colombiano vive sus fases finales y no se sabe quién contratará a Teo para el próximo semestre, habrá que esperar si con Junior de Barranquilla, su eterno amor, se terminan de limar las aspereas del pasado para que juegue sus últimos años en el equipo que lo vio triunfar.