Por fin llegó un buen resultado para Alemania en su casa, frente a nada menos que el subcampeón del Mundial de Qatar 2022. El seleccionado campeón del mundo en 4 oportunidades derrotó a Francia en el Signal Iduna Park, la sede del Borussia Dortmund y repleta de simpatizantes teutones, quienes aplaudieron a sus jugadores luego de la intensa crisis y el no poder ganar luego de 5 partidos sin cumplir con ello.
Luego de que se desvinculara Hansi Flick del banquillo alemán, de inmediato asumió las riendas Rudi Völler de manera interina. El equipo se notó más dinámico tras la salida de Flick, y por supuesto, siempre será positivo vencer al ‘peso pesado’ más importante en Europa actualmente, a pesar de que no contó con Kylian Mbappé en la lista de citados.
El cuadro alemán necesitó del rápido gol de Thomas Müller, el inoxidable atacante a servicio de ‘Die Mannschaft’, además de que Leroy Sané alargó la diferencia parcialmente en el complemento. El gol de penal ejecutado por Antoine Griezmann para Francia no bastó para remontar en la recta final del mismo.
Así fue la victoria de Alemania ante Francia
Desde el primer minuto, el cuadro dueño de casa optó por las jugadas verticales, muy del sello alemán. Intentando mover los hilos y descuadernar la defensa rival, el equipo alemán logró ponerse arriba en el marcador gracias a Müller, quien volvió a reportarse con gol para los suyos después de un largo tiempo.
Todo nació por una fascinante jugada colectiva en territorio rival. En una combinación exquisita involucrando a Serge Gnabry y Benjamin Hendrichs; el lateral del RB Leipzig tiró un centro directo a la entrepierna del goleador, quien la bajó y posteriormente impactó de segunda acción. Nada que hacer para Mike Maignan, el cancerbero de ‘Les Bleus’.
No todo iba a ser positivo para Alemania, dado que una de sus figuras, Ilkay Gundogan, infortunadamente sufrió de un golpe en la parte baja de la espalda. Tuvo que ser sustituido antes de tiempo, para ser más exactos al minuto 25, en reemplazo de Pascal Gross.
El volante salió llorando del campo, por lo que se encienden las alarmas en el FC Barcelona a una semana de iniciarse la UEFA Champions League en su fase de grupos.
En fin, el seleccionado visitante inclinó la cancha y las condiciones a favor, presionando arriba e intentando adueñarse de la esférica. Generó incluso un par de ocasiones claras de gol, exactamente por Aurélien Tchouamení y Randal Kolo Muani, quienes llevaron a que Marc-André ter Stegen se luciera con espectaculares atajadas.
Sacando un total provecho a la efectividad, ya en la recta final del compromiso, Leroy Sané fue el encargado de firmar el segundo gol para los teutones. El extremo del Bayern Múnich le puso su sello a un contraataque muy veloz sobre la banda derecha.
Interceptó en primera instancia Jonathan Tah, quien entregó el balón para Kai Havertz; el creativo metió un pase a la espalda de los centrales, el cual fue capturado por Sané, hombre que pisó el área y tiró un contundente zapatazo al marco rival. Parecía liquidarlo el combinado alemán; sin embargo, llegó un sorpresivo descuento en el que Sané fue artífice.
Sin pasar de ser héroe a villano, Leroy Sané cayó en la trampa dos minutos más tarde, en pleno ataque de la visita. Resulta que Eduardo Camavinga, volante del Real Madrid, enganchó hacia adentro y terminó sufriendo una dura falta que fue sancionada con pena máxima para Francia.
El encargado fue Antoine Griezmann, ariete que se reencontró con un viejo conocido. El exjugador del Barcelona remató hacia la esquina del arco de Ter Stegen, excompañero suyo en el onceno culé. La mandó a toda una esquina del arco y firmó el descuento.
De todos modos, victoria clave para Alemania, que se está preparando de cara a la Eurocopa de 2024 y necesita más resultados así para disputar el anhelado título.