El clásico de la Costa se vio opacado este sábado en horas de la noche, luego de que hinchas del Unión Magdalena y Junior se vieron envueltos en una fuerte gresca en la cancha del estadio Sierra Nevada de Santa Marta. Momentos de angustia vivieron varios aficionados del fútbol gracias a los desadaptados.
El enfrentamiento entre ambos equipos era uno de los juegos más atractivos de la jornada 17 de la Liga Betplay. Sin embargo, este no pudo terminar, dado que al minuto 72 de juego hinchas del Unión Magdalena invadieron la cancha desde la tribuna para pelear con los hinchas del Junior, quienes se encontraban ubicados en otra grada.
En varios videos que fueron publicados en redes sociales quedaron registrados los angustiantes momentos que vivieron varias familias gracias a estos mal llamados hinchas.
El clásico costeño no pudo siquiera terminar, pues ambos equipos se vieron obligados a meterse a los vestuarios ante la gravedad de los hechos. El juez de la contienda Éder Vergara tuvo que verse obligado a suspenderlo cuando este iba igualado a uno.
Los goles del partido fueron anotados por el volante de Junior, Enrique Serje al minuto 57, mientras que Unión Magdalena igualó cuatro minutos después por medio de Stiwar Mena.
El técnico del equipo barranquillero, Juan Cruz Real, aseguró que en la noche del pasado sábado fue imposible hablar de fútbol por las malas condiciones que se dieron desde la previa. “La cancha mala, los vestidores donde llegamos con olor a orines, impresentable, y sin agua. Si queremos mejorar el fútbol de Colombia, esto no es posible, entonces qué puedo hablar del juego. Estoy dolido porque hablamos de querer mejorar, soy extranjero, pero me considero colombiano y la verdad que pasar por esto, duele”, dijo.
“Estoy dolido por lo que nos tocó vivir. Desde un vestidor, que no es apto, inclusive insalubre porque si no está aseado los jugadores pueden tener enfermedades. El estado del campo muy malo. Les doy mérito a mis futbolistas por el contexto que se dio. Hubo muchas cosas que fueron en contra de ver un gran espectáculo y lo peor fue lo que pasó al final”, añadió.
Por su parte, la alcaldesa de la ciudad Virna Johnson rechazó los hechos de manera tajante y presentó el balance que dejó la angustiosa noche. “Qué triste que no puedan disfrutar del fútbol en paz. Reportamos tres detenidos y ofrecemos hasta 5 millones de pesos de recompensa por información que permita identificar a los responsables de iniciar este hecho. Santa Marta merece respeto. Pido a las autoridades judiciales consecuencias ejemplares”, escribió.
No es la primera vez
La polémica con los llamados barras bravas en el fútbol colombiano se ha vuelto una constante en los últimos meses. Durante los últimos años se han presentado hechos inadmisibles que se han llevado la vida de más de un aficionado.
Con los dos equipo de la costa ha habido varios antecedentes esta temporada que han obligado a las autoridades a tomar decisiones. El pasado 15 de febrero del presente año, hinchas del Unión Magdalena invadieron la cancha para agredir a los jugadores de su propio club ante los malos resultados.
En redes sociales quedó grabado el hecho que fue uno de los primeros escándalos del año en materia de violencia en el fútbol profesional colombiano.
Después de una reunión entre delegados de campo y ambos equipos, se decidió terminar el partido por falta de garantías, es decir, este resultado queda en favor del Atlético Bucaramanga que llegó a su segunda victoria en el campeonato.
Ahora bien, tan solo seis días después de ese suceso en el estadio Sierra Nevada de Santa Marta, hinchas del Junior fueron los protagonistas de una gresca en el Metropolitano al enfrentarse con hinchas del América de Cali.
Lamentablemente, esa rivalidad traspasó la línea en la tribuna por una serie de desmanes que se presentaron al término de la primera mitad, cuando el partido todavía se encontraba empatado sin goles. El árbitro señaló el punto medio de la cancha, pero en la tribuna occidental alta no se enteraron por culpa de un enfrentamiento entre hinchas de Junior y algunos de América que fueron identificados como infiltrados.
Desde la tribuna norte y sur del Metropolitano varios miembros de la barra local se pasaron por encima de las vallas buscando agredir a los aficionados visitantes que eran custodiados por la policía. El reporte de los periodistas asistentes a la zona de prensa, cercana al sector en la que se produjeron los hechos, indica que varias de esas personas iban armadas con objetos cortopunzantes que ingresaron burlando el operativo de la policía para el encuentro.
Asustados por lo que estaba sucediendo, varios hinchas de Junior tuvieron que refugiarse en la zona interior de la tribuna hasta que los uniformados lograron tomar el control y retirar del escenario a los aficionados del cuadro visitante, teniendo en cuenta que no se permitía el ingreso de barras organizadas del América de Cali.
“Se lograron controlar dos riñas y por lo menos 60 hinchas del América fueron retirados del estadio y tres menores fueron conducidos a la UCJ para el restablecimiento de sus derechos”, indicó el coronel Jhon Sepúlveda, subcomandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla.
El reporte es de “dos lesionados al interior del estadio y uno fuera del mismo”, aunque la acción de las autoridades evitó que los enfrentamientos terminaran en un balance más preocupante.