El fútbol no solo es protagonizado por estrellas como Hulk, que en Colombia continúa dando de qué hablar por el golazo de ‘tijera’ que le marcó a Millonarios por Copa Libertadores, sino por los aficionados que eventualmente se roban la actuación por sus intervenciones dentro de la cancha. Hoy, por ejemplo, un pequeño hincha del balompié húngaro, llamado Énok Varga, está figurando en la prensa deportiva de todo el mundo y en las redes sociales.
La historia comenzó con un partido de la segunda división del fútbol de Hungría, entre MTK Budapest y DVTK Diosyor, disputado el pasado 13 de marzo. Pero el compromiso no llamó la atención por el marcador 4-2 a favor del equipo de la capital, sino por una cruel escena de la que fue protagonista Énok Varga, a quien las cosas no le salieron como la esperaba.
Énok Varga estaba celebrando su séptimo cumpleaños, razón por la que su hermano mayor le quiso rendir un homenaje dejándole anotar un gol al rival en el entretiempo. Con lo que no contaba fue con la actitud del guardameta rival, Zsombor Senkó, que sin importarle que se tratara de un niño, le atajó dos tiros al arco.
En la grabación que le está dando la vuelta al mundo se ve al niño corriendo desde la mitad de la cancha hacia el pórtico rival con el balón. En el área chica se ve al menor, con el número ‘10′ en su camiseta, disparar al arco, y al arquero, poco empático, estirando su pierna izquierda para atajarlo.
Acto seguido, el pequeño Énok Varga persigue la pelota para patear una vez más, pero el arquero vuelve a atajar el tiro, encajando la esférica, como si se tratara de un partido profesional.
Lo más triste fue la reacción del niño que en sus primeros pinitos como jugador aficionado ya vivió lo que es sentirse frustrado. Corriendo, visiblemente apenado, pero sin derramar una sola lágrima, acudió a su hermano, quien le estiró las manos para alzarlo y llevarlo afuera del campo de juego.
El clip también deja ver la reacción de la hinchada del MTK Budapest, que desde la tribuna reprochó al guardameta rival por la actitud con el niño. Para mala fortuna, el arquero vio caer su valla cuatro veces, hecho que sin duda debieron festejar sus detractores.
La reacción de la familia del pequeño Énok Varga
Pese al desplante del guardameta Zsombor Senkó con Énok Varga el día de su cumpleaños, la familia pidió a la hinchada no señalar ni arremeter contra él. Por el contrario, dejó abierta una invitación a salir y demostrar que lo que pasó en la cancha, se queda en la cancha.
En conversación con el medio de comunicación hungaro Csakfoci, la hermana del niño, Béla Varga, comentó: “Lo más importante es que no le guardemos rencor a Zsombor, de hecho, nos gustaría quedar con él para tomar un helado, seríamos felices y sería una historia positiva”.
Entretanto, el padre de Énok Varga afirmó que la actitud del cancerbero obedeció a la petición que se le dio desde el banquillo de su equipo.
“Fuera de esta situación, es un deportista que tomó una mala decisión, pero queremos que sienta que la vida no se detiene con un error. Además, desde un costado del campo, desde el banquillo, lo incitaron a eso y le gritaron que lo detuviera. Zsombor ahora está crucificado, las personas que le gritaron desde el banco están en silencio, aunque deberían estar parados junto a él”, expuso.
En cuanto al pequeño, comentó que ya está entrenando para deslumbrar con sus tantos. “Énok es un chico con buen manejo del balón y muy buena coordinación de movimientos. Acaba de convertirse en el máximo goleador de un torneo en Debrecen el fin de semana”, agregó.