El Atlético de Madrid rescató en el minuto 100 una agónica victoria desde el punto de penalti ante el RCD Espanyol, un partido que el belga Yannick Ferreira Carrasco, que también había adelantado a los rojiblancos, resolvió en el último segundo para dejar a los de Diego Pablo Simeone en la cuarta plaza de la Liga española.
Ni el equipo ni la afición colchonera dejaron de creer. El duelo se encaminaba al empate tras un largo descuento cuando el colegiado Figueroa Vázquez decidió consultar el VAR por lo sucedido en la última jugada del encuentro; el andaluz señaló una rigurosa mano de Raúl de Tomás en el área y Carrasco, a quien llaman ‘Maluma Baby’ por su parecido con el cantante colombiano, no falló la pena máxima.
Antes, el belga, que entró en el terreno de juego tras el descanso, se había encargado de adelantar al cuadro local, un tanto que neutralizó De Tomás en una magistral ejecución de falta justo después de que los colchoneros se quedaron con uno menos por la discutible expulsión de Geoffrey Kondogbia a los 71 minutos. Finalmente, el Atleti rescató los tres puntos para asentarse en el cuarto puesto.
En su regreso al coliseo rojiblanco, donde el público le ovacionó el pasado miércoles tras caer con honor ante el Manchester City en cuartos de Champions, el vigente campeón liguero topó con la consistencia perica, amparada por un sistema de tres centrales que les permitió a los de Vicente Moreno no pasar excesivos apuros en los primeros 45 minutos.
De hecho, ni João Félix ni Ángel Correa, que entró en el once en lugar de Antoine Griezmann, encontraron huecos para tratar de llevar peligro al área de Diego López. El cuadro rojiblanco se volvió previsible y se mostró falto de ideas, de nuevo se encomendó a Jan Oblak, que a los seis minutos salvó a los suyos al desviar un cabezazo de Cabrera, para marcharse todavía vivo al descanso.
Además, la lesión de Thomas Lemar, que salió del campo transportado en camilla por sus compañeros, obligó al ‘Cholo’ a cambiar sus planes en la reanudación. Sin el francés, prescindió también de João Félix y de Vrsaljko para dar entrada a Griezmann, Matheus Cunha y Yannick Carrasco.
Los tres ofrecieron las respuestas que buscaba el técnico argentino. El francés asistió al brasileño para avisar primero a Diego López, que desbarató una jugada posteriormente anulada por fuera de juego, y fue el belga, en una contra después de un paradón de Oblak a disparo de Darder, el que consiguió desatascar a los rojiblancos tras sentar a Aleix Vidal y superar al meta gallego (min. 52).
Correa pudo incrementar la cuenta en una acción en la que buscó un pase inexistente, antes de que se desatase la tormenta. Oblak salvó el tanto blanquiazul con una gran mano abajo a remate de Raúl de Tomás y solo un minuto después, en el 69, Kondogbia vio la segunda amarilla por una mano y dejó a su equipo con uno menos.
En la falta provocada por el francés, De Tomás no lo dudó y disparó a puerta, y el esloveno, héroe minutos antes, erró esta vez y vio cómo el esférico se colaba en el fondo de las mallas tras tocar ligeramente en el palo (min. 74).
Sin embargo, el tanto no amilanó a los colchoneros, que insistieron y buscaron con furia la portería catalana. Con el tiempo casi cumplido, Diego López parecía salvar al cuadro de Vicente Moreno en la última jugada del choque, pero la locura se desataba cuando el colegiado se dirigía al VAR para revisar la acción: había mano de Raúl de Tomás.
Corría ya el minuto 100 y Carrasco se dirigió hacia los 11 metros. Respiró, tomó carrera y ejecutó un lanzamiento lejos del alcance del portero perico para dar a la entregada afición rojiblanca la cuarta victoria consecutiva como local.
*Con información de Europa Press.