Este domingo quedará inscrito en la historia de River Plate como el día en el que despidieron a su técnico más ganador, Marcelo Gallardo, el mismo que el pasado jueves anunciara el final de su contrato y, por consiguiente, su salida del equipo de cara al año 2023.
Aunque en las redes sociales el ‘Muñeco’ recibió miles de mensajes de cariño, la gran despedida se esperaba en el estadio Monumental ante Rosario Central, el último partido del técnico en condición de local.
Y los hinchas no desentonaron, pues le prepararon una auténtica fiesta con banderas, extintores y un coro generalizado en el que le agradecieron por los 14 títulos que consiguió desde la línea, entre ellos dos títulos de Copa Libertadores ante Tigres de México y el de la imborrable final ante Boca Juniors en Madrid.
“¡Muñeco!, ¡Muñeco!” se escuchaba gritar desde las tribunas, mientras Gallardo giraba su mirada hacia distintos puntos, incrédulo de todo lo que le preparó la afición para esta despedida, que no será oficial hasta la próxima semana, cuando se dispute el último partido de la liga argentina.
Al tiempo que se escuchaba la pólvora y el humo blanco y rojo empañaba los lentes, el ‘Muñeco’ se acercó a su ahora colega Carlos Tévez, entrenador de Rosario, y con quien se fundió en un profundo abrazo que acaba con las especulaciones sobre su relación ante la feroz rivalidad entre los dos equipos más importantes de ese país.
Luego de transitar por toda la línea saludando a los hinchas, Gallardo al fin se sentó en el banquillo, esperando por el pitazo inicial que llegó con Juan Fernando Quintero como inicialista y Miguel Ángel Borja ausente a raíz de la acumulación de tarjetas amarillas.
Decisión difícil
Esta es solo la respuesta lógica del anuncio que hizo Gallardo el pasado jueves en la sede del club, día en el que decidió convocar a una rueda de prensa extraordinaria, después de seis partidos consecutivos sin atender a los medios de comunicación, algo que ya parecía premonición de algo grande por confirmarse.
Visiblemente afectado, el técnico argentino comunicó que no renovaría otro año más con la institución. “Les comuniqué a los dirigentes que es mi final de contrato. Termina en diciembre y ya no seguiré en el club. Es una de las decisiones más difíciles y más sentidas, es un momento delicado para expresarme”, manifestó.
A pesar de lo duro que es despedirse de su casa, Gallardo aseguró que se iba satisfecho con todos los logros obtenidos en estos ocho años de gestión. “Más allá de la tristeza tengo una paz interna muy sentida, que me hace estar bien conmigo mismo porque el largo camino recorrido estos años me hace sentir muchísimo orgullo. Es la palabra que quiero destacar”, completó.
Por más que los directivos insistieron en mantenerlo en el cargo, el ‘Muñeco’ siente que es el momento de partir en busca de nuevos objetivos. “Todo tiene un final, es el momento de terminar de cerrar un ciclo hermosísimo, muy valioso”, aseguró.
Fruto del trabajo, Gallardo se ganó el doble de cariño que ya tenía por su paso como jugador, dejando grabado con letras doradas su nombre en los libros de historia. “Quiero agradecerle al hincha, que en cada pequeño homenaje que me han hecho al entrar a un campo de juego, sobre todo en estos últimos años, será un recuerdo inolvidable”, dijo.
El técnico manifestó que este domingo sería su último partido en el Monumental, frase que volcó a toda la afición a agotar la boletería y aportar por distintos medios para la espectacular despedida de su ídolo, que se va por todo lo alto.