La Copa de África sigue su curso con pocos goles, pero muchas situaciones virales que dan muestra de lo pintoresco que resulta el principal campeonato a nivel de selecciones en ese continente. Esta vez el encuentro entre Malí y Túnez fue escenario de una decisión arbitral que sin duda pasará a la historia como una de las más insólitas que se han producido en campeonatos avalados por la FIFA.

El partido empezó con un rendimiento bastante regular por ambos seleccionados, algo que se ha vuelto una constante en esta edición del torneo. Para la segunda parte, Malí salió con otras intenciones y empezó a inclinar la cancha hasta que logró al apertura del marcador desde el punto penal a través del cobro de Ibrahima Kone, al minuto 48.

Wahbi Khazri tuvo la oportunidad de empatar al 78 para los tunecinos por la misma vía, sin embargo, falló el cobro y facilitó la victoria de las Águilas, lo que no pasó desapercibido por el protagonismo del árbitro zambiano Janny Sikazwe.

Cuando el marcador apenas sobrepasaba los 85 minutos del partido, el juez central se llevó el silbato a la boca y señaló el final ante la sorpresa del banquillo de Túnez que inmediatamente reclamó en cabeza de su técnico Mondher Kbaier. Al caer en cuenta de su error, Sikazwe añadió cuatro minutos de reposición, decisión que agregó más polémica a la decisión puesto que el partido ni siquiera llegó a los 90 reglamentarios.

Para rematar, durante el segundo tiempo hubo cambios, dos penales y dos revisiones del VAR, sumatoria de episodios que mínimo hubieran llevado el partido hasta los 95 o 96. Los jueces de línea quisieron corregir la decisión de su colega, pero ya era demasiado tarde. Los jugadores de Túnez se fueron al vestuario y el encuentro se dio por finalizado.

El cuerpo técnico de Kbaier corrió hasta el centro del campo para reclamarle al árbitro por su decisión, no obstante, se mantuvo firme declarando la victoria de Malí para ponerse en cabeza del grupo F que comparten con Mauritania y Gambia. De momento no se sabe qué pasará con el resultado, aunque se espera que Túnez haga una demanda oficial en contra del colegiado que podría ser sancionado por la Confederación Africana de Fútbol (CAF).

El cuarteto arbitral tuvo de salir escoltado por la seguridad del estadio ante la cólera de los tunecinos. Media hora más tarde el partido parecía que se iba a reanudar. Los malienses regresaron al terreno de juego para disputar los últimos segundos del tiempo reglamentario y una eventual prolongación, pero Túnez permaneció en vestuarios, lo que podría ser señal de una reclamación. Janny Sikazwe arbitra su quinta Copa de África, también participó en el Mundial 2018 y dirigió finales de copas africanas de clubes.

El doping también hizo presencia

Costa de Marfil, que debutará en la Copa de África el miércoles ante Guinea Ecuatorial, no podrá contar con su portero Sylvain Gbohouo, suspendido por dopaje, anunció este martes la Federación Marfileña de Fútbol.

Un portavoz de la FIFA confirmó a la AFP que el jugador fue “suspendido provisionalmente por dopaje”. En una conferencia de prensa, el seleccionador de Costa de Marfil, el francés Patrice Beaumelle, explicó que Gbohouo, 33 años, fue controlado positivo en noviembre tras la derrota (1-0) contra Camerún en partido de clasificación para el Mundial 2022.

El técnico aseguró que el jugador se sometió a un tratamiento oftalmológico que habría desencadenado el positivo. Gbohouo es el habitual portero titular de los Elefantes, que forman parte del grupo de favoritos para ganar la Copa de África que se disputa en suelo camerunés.

El arquero ya disputó todos los partidos salvo la final en la edición de 2015, ganada por los marfileños.

*Con información de AFP.