El pasado domingo 28 de mayo se corrió la tradicional carrera las 500 millas de Indianápolis, la cual estuvo marcada por varios accidentes al final de la jornada.
La edición número 107 tuvo a más de 30 pilotos durante las 200 vueltas que completaban la carrera. Con normalidad transcurrió la competencia durante más de 100 vueltas, en las cuales ocurrieron algunos accidentes menores, sin embargo, a falta de 16 vueltas para el final sucedió uno de los accidentes más impresionantes que se hayan visto en la historia de las 500 millas de Indianápolis y en general de la Indycar.
Todo inició en el momento cuando el piloto Felix Rosenqvist se deslizó y chocó con la pared, segundos después Kyle Kirkwood intentó esquivar el vehículo que se encontraba en medio de la pista, pero con la mala fortuna que chocó la esquina del carro con una de sus llantas.
El auto de Kirkwood se estrella a más de 300 km/h contra la pared e inmediatamente el auto se volcó y se deslizó generando chispas en el techo del auto. La carrera automáticamente se detuvo mientras los pilotos involucrados en el hecho eran evacuados de la zona.
Video del accidente en las 500 millas de Indianápolis
Además, la rueda trasera de uno de los carros se soltó y salió volando sobre la tribuna llena de personas que observaban la carrera, lo que obligo a los espectadores a agacharse para ponerse a cubierto y evitar el fuerte golpe de la llanta.
La carrera minutos después se reanudó con normalidad, pero a falta de ocho vueltas para el final un nuevo accidente provocaba la bandera roja en la Indianápolis.
En esta ocasión Pato O’ward, Simon Pagenaud y Agustín Canapino se involucraron en un fuerte choque que terminaba con uno de los carros deslizándose sobre la pared del circuito.
Sin embargo, y a pesar de las impresionantes imágenes, ningún piloto resultó herido de gravedad.
Los autos volvían a la acción, pero un tercer accidente produjo que la carrera nuevamente se detuviera. Justo en el reinició de la acción, cuando los pilotos se encontraban justo en la línea de salida, Benjamin Pedersen, Ed Carpenter y Graham Rahal se vieron involucrados en un choque y obligó por una vez más a sacar la bandera roja para detener la carrera.
El final de la carrera
La bandera verde salió una vez más y tras estos múltiples accidentes se daba inició a las últimas vueltas de la carrera. Ericsson adelantó a Newgarden y se quedó en la primera posición ampliando su ventaja. Finalmente, Newgarden aprovecho el impulso y logró volver a quedarse con la primera posición, dejando atrás a Ericsson, quien solo podía ver cómo su compañero se quedaba en la primera posición tras más de 190 vueltas.
No hubo un intento efectivo por parte de sus perseguidores para adelantarlo en la última vuelta y finalmente, Josef Newgarden cruzó la línea de meta quien celebraba con una multitud de fanáticos que acompañaron la competencia de principio a fin.
El piloto del Team Penske se llevó la victoria y se alzó con la tradicional botella de leche con una diferencia de 0.0974s sobre Ericsson, quien terminó segundo por delante de Ferrucci y de Alex Palou, quienes terminaron en la tercera y cuarta casilla, respectivamente.
Tras este importante e histórico evento, la competencia seguirá en la séptima carrera del torneo estadounidense en Detroit, el próximo domingo 4 de junio a las 2:00 p.m. (hora colombiana) en un circuito callejero.