Lo que inició como una fiesta por el adiós de Marcelo Gallardo terminó en pelea por el empujón de Juan Fernando Quintero al árbitro Fernando Echenique. Cuando transcurrían los 15 minutos de reposición que tuvo que dar el juez, el colombiano perdió la paciencia y terminó expulsado a raíz de su reprochable reacción.

De acuerdo con lo que se logra ver en el video, Quintero se enoja por un ‘manotazo’ de Echenique, segundos antes de reclamarle y, como último recurso, empujarlo con las dos manos en el pecho.

Por supuesto, el árbitro le mostró la tarjeta roja y eso, lejos de calmar a Juanfer, lo encendió más, al punto que sus compañeros tuvieron que agarrarlo para impedir que el lío se hiciera más grande.

El marcador final 2-1 terminó siendo solo una anécdota, aunque River quedó oficialmente fuera de la carrera por el título y será juez de Racing en la última jornada del campeonato argentino.

Adiós a la ilusión

Con el pitazo final, llegó el momento de los abrazos y las lágrimas. Quintero, ya un poco más calmado, regresó al césped del Monumental y rompió en llanto cuando Gallardo empezó a despedirse de todos sus compañeros, amigos y dirigidos, siendo Juanfer uno de esos que el ‘Muñeco’ siempre defendió a capa y espada.

La despedida no pudo ser completa, pues esta derrota los priva de llegar con opciones matemáticas a la última jornada, perdiendo la pequeña oportunidad que les había dado Boca Juniors con su caída en Rosario a manos de Newells.

Juan Manuel García abrió la cuenta para los rosarinos, tras un grosero error del peruano Luis Advíncula, que falló un pase que interceptó García, y después no consiguió despejar ante el potente avance del delantero rojinegro. El colombiano Willer Ditta aumentó para el local con un cabezazo y desnudó las limitaciones de Boca, que trastabilla en un momento clave del torneo.

Incluso, Newell’s se sobrepuso al hecho de jugar casi una hora por la expulsión de Juan Sforza por doble amonestación, pero Boca no consiguió hacer valer esa diferencia numérica en el terreno.

De este modo, el cuadro xeneize dejó atrás un invicto de 13 partidos, en el que había ganado 10 de ellos que lo habían llevado a lo más alto del torneo. Aunque sigue líder con 48 puntos, será superado por Racing si el martes derrota de visita a Lanús.

“Nos equivocamos y lo pagamos. Nos faltó meterla. Tuvimos llegadas y no pudimos convertir. Todavía dependemos de nosotros, de lo que hagamos en los próximos partidos. Es el único mensaje. Un tropezón lo tiene cualquiera. Hay que dar vuelta la página y pensar en el próximo partido”, consideró el director técnico Hugo Ibarra.

No obstante, a Boca le queda también pendiente el partido suspendido ante Gimnasia y Esgrima, cuyos 81 minutos restantes se disputarán el miércoles próximo y, de no mediar circunstancias excepcionales, todo se resolverá en la última fecha, que se jugará el próximo fin de semana.

River, en la despedida ante su gente de Marcelo Gallardo tras ocho años como entrenador millonario, tenía la chance de quedar a un solo punto de Boca, pero se vio sorprendido por Rosario Central, que lo derrotó 2-1 en un Monumental que se había vestido de fiesta para despedir al ‘Muñeco’.

Alejo Vélez anotó los goles para Central, un equipo con muchos juveniles que ya había logrado otros resultados meritorios, y Matías Suárez descontó para un River desconcentrado, con la cabeza puesta en el adiós del entrenador más exitoso de su historia, que se marcha con 14 títulos en el maletín.

Con información de la AFP.