Olympiacos no pudo celebrar mucho su pase a semifinales de la Copa de Grecia porque inmediatamente tuvo que cambiar el chip a una nueva jornada de la Superliga, en la que se encuentra disputando una lucha cerrada por los cupos a torneos internacionales de la próxima temporada.
Míchel volvió a alinear como titular a James Rodríguez, que durante la semana reportó molestias musculares, pero las superó sin problemas para sumar minutos el miércoles 25 de enero ante el Aris Salónica (0-1) y volver a saltar al campo del estadio Georgios Karaiskakis recibiendo al OFI de Creta, justamente uno de los primeros equipos que enfrentó a su llegada a Grecia.
Desde los primeros minutos, el 10 cumplió con la tarea que le ha puesto el cuerpo técnico: acercarse a los centrales para pedir el balón, levantar la cabeza y buscar la apertura por los extremos, esta vez, ocupados por el caboverdiano Garry Rodrigues en el costado derecho y el español Pep Biel en el izquierdo.
Los rojiblancos tuvieron la mayor posesión en la primera parte, como ya es habitual, pero el OFI se fue adelante primero con el tanto del delantero Nouha Dicko a los 19 minutos. Estar debajo en el marcador fue un golpe anímico para Olympiacos, que volvió a tomar la pelota y creó varias opciones de peligro en el arco rival.
Lo justo era irse con el empate al vestuario y eso fue lo que pasó tras una pelota quieta que James cobró magistralmente al corazón del área. Bakambu se levantó por encima de la defensa cretense y la mandó a guardar luego de peinarla en el camino para el 1-1 con el que se fueron al descanso.
En el segundo tiempo, la tónica siguió siendo la misma. Olympiacos, teniendo las opciones, llegando con peligro al arco rival, y el OFI, replegado en su propio campo, esperando que una contra le diera el ‘milagro’ del segundo. Cruzando sobre el minuto 60, las estadísticas demostraban que los locales tenían un total de 15 remates a puerta, mientras su rival solo había disparado una vez, la del gol en el primer tiempo.
Míchel resolvió que la mejor decisión era sacar a Garry Rodrigues y enviar un jugador de mejor pie como Masouras, para que buscara combinar con James en busca de algún callejón que dejara en posición de gol a Bakambu. Pero el gol no llegaba y la impaciencia se hacía más grande, recordando que hace una semana perdieron su racha positiva de victorias por un pálido empate ante Atromitos en condición de visitante.
Además, tenían la necesidad de ganar para escalar hasta la tercera posición y meterles presión a los dos primeros equipos de la tabla, AEK y Panathinaikos, que no han estado tan bien en el reinicio de la competencia.
Por fortuna, tantos intentos surtieron su respectivo efecto. Youssef El Arabi, que acababa de ingresar al campo en lugar de Bakambu, fue la llave para remontar el partido oficialmente a los 76 y ponerse por encima en el tramo final del compromiso.
Luego de conseguir el 2-1 final, James salió del campo, exactamente al minuto 86, dejando su lugar para el maliense Diadie Samassékou, en busca de más músculo en el centro del campo que ayudara a cerrar el duelo con victoria y tres puntos más en el bolsillo.
El colombiano selló de esta manera otra gran presentación en Grecia con una calificación de 8.8 sobre 10, superior al resto de sus compañeros, lo que da muestras más que evidentes de su gran recuperación y lo que aporta partido a partido en el mediocampo rojiblanco.
Tal vez, esa sea la razón por la que Míchel lo considera titular indiscutible y lo ve uno de los jugadores claves en el proyecto a futuro.