Este jueves se produjo un acto de racismo, previo a la semifinal de la Copa Libertadores entre Boca Juniors y Palmeiras. Este incidente, que fue capturado en video por seguidores brasileños, coloca al club argentino en riesgo de enfrentar una severa sanción económica por parte de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
El video viralizado, grabado aproximadamente una hora antes del pitido inicial, muestra a un hincha de Boca Juniors utilizando su teléfono móvil para escribir la palabra “macaco” y luego mostrarla provocativamente a la hinchada brasileña. Este acto discriminatorio constituye una clara manifestación de racismo, lo que acentúa la creciente lucha que el fútbol sudamericano lleva adelante contra estas conductas inaceptables.
Esta situación ha generado una profunda inquietud en la institución xeneize, ya que en la edición 2022 de la Copa Libertadores, algunos aficionados fueron grabados realizando gestos de simios durante un partido de octavos de final en el estadio Arena Corinthians. Esto resultó en una multa de 10 mil dólares para el club argentino, marcando una reiteración de incidentes similares que ya habían ocurrido durante la fase de grupos.
En esa ocasión, Boca Juniors había apelado la sanción ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), pero el organismo internacional mantuvo la penalización. Importante destacar que estas multas se deducen directamente de los premios otorgados a los equipos por su participación en competiciones internacionales.
En abril de 2022, la Conmebol subrayó su firme rechazo a cualquier forma de racismo y violencia en sus torneos, endureciendo los controles y las sanciones para abordar estos incidentes. Otros clubes como Racing, Newell’s, River Plate y Gimnasia también han enfrentado sanciones similares en el pasado.
A medida que los equipos continúan infringiendo estas normas, las sanciones se vuelven más severas y pueden llegar a incluir la prohibición de la presencia del público en secciones específicas de los estadios o incluso la suspensión de un estadio completo. Por lo tanto, este último acto de racismo podría tener consecuencias graves para el equipo argentino.
Boca no pudo pasar del empate
Boca Juniors y Palmeiras igualaron 0-0 en un intenso partido de ida por las semifinales de la Copa Libertadores, jugado la noche del jueves en el estadio La Bombonera, ante unos 48.000 espectadores.
En un cotejo con buena dinámica, más allá del cero, el Xeneize fue el que tuvo el protagonismo y el que generó las situaciones más claras para quedarse con la victoria. Sin embargo, fue errático en la definición y Palmeiras consiguió rescatar un empate que le puede servir de cara a la revancha en su casa.
El empate en cero castigó la falta de eficacia de Boca, que no por casualidad anotó muy pocos goles en las eliminatorias previas –apenas dos frente al Nacional uruguayo en cuatro partidos-, y ahora deberá jugarse a todo o nada en suelo paulista.
Palmeiras se aferró a la versión de equipo más eficaz que brillante, hizo su negocio con un empate en una Bombonera volcánica, y tratará de conseguir en el Allianz Parque el pasaje a su tercera final en los últimos cuatro años, aunque deberá tomar precauciones frente a un Boca que, aun sin fuego ofensivo, cumplió el jueves una de sus mejores actuaciones de este año.
El desquite se jugará el jueves próximo en el Allianz Parque de Sao Paulo, y el ganador se medirá en la finalísima contra el vencedor de la llave brasileña entre Fluminense e Inter de Porto Alegre, que igualaron 2-2 en la ida.
Con información de la AFP.