Un nuevo hecho de violencia e intolerancia se registró en el fútbol colombiano. Durante el partido Real Cartagena vs. Fortaleza, en el estadio Jaime Morón León de la capital de Bolívar, los hinchas del equipo local invadieron la cancha.
No conformes con invadir el campo de juego, los hinchas agredieron física y verbalmente a los jugadores de Real Cartagena, quienes corrieron para protegerse de la turba.
Todo ocurrió después del minuto 30, cuando Fortaleza marcó el segundo tanto del compromiso. Inconformes con el desempeño del Real Cartagena, los hinchas corrieron a agredirlos. Frente a eso, el árbitro Camilo Colmenares suspendió el partido hasta que los ánimos se calmaran.
Los encargados de poner a celebrar a Fortaleza fueron José David Ampudia y Sebastián Navarro. Por el lado de Real Cartagena, descontó Santiago Gómez.
La Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales rechazó estos hechos y pidió garantías para los futbolistas en el país. “Hacemos un llamado a las autoridades para que garanticen la seguridad de todos los trabajadores del fútbol cuya integridad debe estar por encima de cualquier resultado. ¡Entre todos debemos cerrarle la puerta a los violentos!”, escribieron en X.
El teniente Germán Manrique, de la Policía de Cartagena, explicó que las unidades policiales intervinieron para evitar que escalara a mayores. El equipo local agradeció a los uniformados por toda la protección: “¡Gracias a la Policía Nacional, al personal de logística y seguridad, a los árbitros y al club Fortaleza!”.
“Una vez controlada la situación, se dispuso de un dispositivo adicional como refuerzo a la seguridad”, agregó el teniente Manrique.
Real Cartagena es tercero por el Grupo A, con tres unidades; mientras que Fortaleza encabeza el grupo con siete puntos.
La División Mayor del Fútbol Colombiano (Dimayor), a la fecha de la publicación de este artículo, no se había pronunciado al respecto.
Amenazas contra Once Caldas
La Dimayor rechazó los actos de violencia e intimidación de los que ha sido víctima la junta directiva, en particular Tulio Mario Castrillón, presidente de Once Caldas.
Asimismo, hizo un llamado a la sana convivencia en el fútbol, “ya que los resultados deportivos no pueden convertirse en justificación para la afectación de la integridad de las personas que trabajan en beneficio del fútbol profesional colombiano”.
“Nuestra institución se solidariza con el club Once Caldas y sus dirigentes, y en virtud de ello, insta a las autoridades competentes para adelantar las investigaciones necesarias, las cuales permitan la identificación de los responsables y de ser del caso, se adopten las medidas oportunas para garantizar la seguridad e integridad de las directivas del club”, sentenció la Dimayor en un comunicado.