La superestrella de las Artes Marciales Mixtas (MMA) Conor McGregor completará el sábado su tercer regreso a la competición, ante el estadounidense Dustin Poirier, en un combate que se celebrará en Abu Dhabi y que está organizado por el UFC (Ultimate Fighting Championship).

La carrera del peso ligero McGregor (32 años) se ha convertido en un eterno retorno. Seis meses después de haber anunciado una nueva retirada, regresará a la jaula para recuperar su estatus de figura de proa de la UFC y recibir un cheque de cinco millones de dólares (4,1 millones de euros).

Esta suma aumentará con los ingresos del ‘pay per view’ televisivo. Para Colombia la pelea será transmitida por ESPN desde las 10:00 p. m. de este sábado 23 de enero.

‘The Notorious’, habituado a los problemas con la justicia, espera hacer olvidar sus últimos capítulos después de haber pasado dos días detenido en Córcega en septiembre, tras una denuncia por tentativa de agresión sexual y exhibición sexual.

Puesto en libertad dos días después, sin cargos, desmintió “vigorosamente toda acusación de mal comportamiento”.

En su regreso a la UFC, McGregor, que se fue con una victoria en 40 segundos frente al estadounidense Donald Cerrone en enero de 2020, no ha elegido el camino más fácil.

Es cierto que batió a Poirier, también de 32 años, en 2014 por KO en el primer round, pero el estadounidense ha ganado cinco combates desde noviembre de 2017, sufriendo una sola derrota, contra Khabib Nurmagomedov.

“El plan es batir a Conor McGregor por todos los medios necesarios, sangre y tripas para competir de nuevo por el título mundial”, dijo.

Por su parte, McGregor señaló: “llevo deseando esta nueva prueba que ofrecerá Dustin desde nuestro primer combate, y yo también mostraré mi increíblemente profundo arsenal”.

McGregor, que ya había asegurado que se retiraba en varias ocasiones en el pasado, lo anunció de nuevo el pasado julio pero pocos le creyeron. Desde entonces ha seguido vinculado a un posible combate estrella contra el boxeador filipino Manny Pacquiao.

Nurmagomedov en el horizonte

Adepto a las declaraciones provocativas, McGregor ha optado esta vez por el perfil bajo, el jueves en conferencia de prensa.

“Me gustaría tomar una copa con él, me siento honrado de enfrentarlo. Los dos somos competidores y será un supercombate. Pero tengo muchas armas en mi arsenal y tengo ganas de sacarlas para hacer una bonita actuación para todos los fans del mundo”, explicó el irlandés.

El regreso de McGregor será en la burbuja de la ‘Fight Island’, en Abu Dabi, para evitar los riesgos de propagación del coronavirus.

La UFC observa la vuelta del ídolo como un primer paso para que intente la revancha contra el invicto Khabib Nurmagomedov.

Entre McGregor y el ‘Águila de Daguestán’ hay todavía cuentas por arreglar. El irlandés y el ruso se enfrentaron en octubre de 2018 y el combate, dominado por el segundo, terminó con una gran pelea y una suspensión para las dos estrellas.

Problemas legales

El luchador irlandés afronta una batalla legal después que dos mujeres lo acusaran de agresión y daños personales. La cadena pública irlandesa RTE informó que los abogados de las supuestas víctimas han presentado ante el Tribunal Superior de Dublín dos demandas separadas contra McGregor, a quien acusan de causarles “daños personales físicos”.

Según la RTE, otro hombre figura, junto a McGregor, como demandado en este juicio, para el que aún no se ha fijado fecha.

*Con información de AFP.