Zinedine Zidane ha protagonizado un curioso episodio este jueves. El entrenador del Real Madrid sufrió un accidente cuando se dirigía al entrenamiento del equipo en el complejo de Valdebebas.La sorpresa del otro implicado, Ignacio Fernández, fue mayúscula cuando se dio cuenta que quien lo había estrellado era el técnico francés. “Nada más verlo le reconocí y le dije que me hubiese gustado conocerte en otras circunstancias, pero tampoco está tan mal", confesó Ignacio en La Voz de Galicia.Zidane le pidió a su víctima que intercambiaran los números de los seguros y dejarán el papeleo para otro día pues tenía afán de llegar al entrenamiento.
Sin embargo, el hombre no dejó pasar la oportunidad de solicitar un selfi al técnico con la que recordará este incidente por siempre.“Le pedí se podíamos sacar un selfi, porque si no la gente no me iba creer que me diera un golpe Zidane”, explicó el feliz afectado.Fernández también hizo una curiosas propuesta al exfutbolista que fue “puede ser todo o nada. Cambiemos de automóvil y dejamos las cosas así”.El auto de Zidane era un Audi RS 3 Sportback TFSI Quattro S Tronic, valorado en más de 60.000 euros. Mientras que el carro de la víctima era de la marca alemana pero un modelo muy inferior.Luego el representante de Zidane se puso en contacto con Fernández: "Me dijo que estaban muy agradecidos, porque Zidane iba al entrenamiento y tenía mucha prisa, por lo que agradecía que no entretuviera pidiéndole firmas, camisetas o entradas".
Lo más curioso es que el hombre manifestó que nada de eso le importaba pues no era fanático del fútbol y su único deseo es que le dejen su vehículo en su estado anterior.“A mí el fútbol no me interesa mucho”, expresó Fernández, que es el gerente de la tienda de Muebles El Barato.En este entrenamiento, el colombiano James Rodríguez hizo trabajos diferenciados de sus compañeros pues sigue realizando su rehabilitación de una lesión de la cadera que sufrió la semana pasada.