La temporada en Europa está a punto de terminar y ya se han disparado los rumores sobre el futuro de varias de las grandes estrellas. Aunque Lionel Messi y su divorcio con el París Saint-Germain se está robando toda la atención de la prensa, también hay casos sonados como el de Zlatan Ibrahimovic, que en los próximos días le pondrá fin a su historia con el AC Milan.
Con contrato hasta junio de 2023, no parece que la dirigencia del conjunto rossonero tenga pensado renovarle a un jugador de coste alto y que esta temporada ha aportado muy poco a raíz de las lesiones que no le dejaron encadenar el número de partidos al que está acostumbrado.
En la Serie A, el sueco apenas ha disputado 4 partidos y actualmente se encuentra fuera por una reciente lesión en la pantorrilla que incluso lo tiene en duda para lo que resta de la campaña. En Champions la situación es aún más diciente, pues camino a disputar la semifinal frente a Inter, Zlatan no ha disputado un solo minuto, razón por la que, en caso de ser campeones, no recibiría medalla por parte de la Uefa.
Bajo ese panorama, Ibrahimovic ha tenido que mirar otros horizontes, apoyado en el renombre que se hizo en Italia gracias a sus extraordinarias campañas con los tres equipos más grandes del país: Juventus, Inter y Milan.
Es por eso que el Monza le ha abierto las puertas y pretende ponerle en la mesa un contrato para la próxima temporada. De acuerdo a Foot Mercato, el sueco ya tiene un acuerdo verbal con la dirigencia biancorossi y solo falta que se termine su contrato con el Milan para poder concretar el fichaje.
“El porcentaje de posibilidades de ver fichar al sueco con el actual onceno de la Serie A supera incluso el 90%”, ajusta el medio especializado en fichajes, apuntando que la gran ventaja del Monza es que Ibrahimovic no tendría que moverse muy lejos de Milán, la ciudad que eligió como su casa desde hace muchos años.
Todavía se siente fuerte
Muchos pensaban que al terminar su paso por el Milán llegaría el momento del retiro, sin embargo, Ibrahimovic no piensa así e incluso aspira a sumar minutos para entrar en la convocatoria de Suecia de cara a la próxima Eurocopa del 2024. “Si me siento bien y el seleccionador me elige, le ayudaré a él, al equipo y al país, me enforzaré por dar lo mejor”, dijo en una rueda de prensa, durante la pasada fecha Fifa en la que empezaron las eliminatorias hacia el torneo continental.
“A mi edad, no puedes pensar en el futuro, sino que piensas en el presente, aunque yo soy el pasado, el presente y el futuro”, afirmó el delantero de 41 años.
Su convocatoria en marzo tomó por sorpresa incluso a los suecos, que recibieron como un héroe al más emblemático jugador de su historia. “He estado fuera 14 meses en los que solo sufrí (por una lesión). Ahora estoy de vuelta y me siento bien. Juego con alegría y sin dolor. Veremos cuánto tiempo dura, pero es divertido estar aquí. Me siento como el padre de este equipo”, señaló.
Ibra está convencido que esa posibilidad de jugar en Monza le dará opciones de seguir siendo llamado a la selección. “Les dije a mis compañeros: ‘Seguro que se preguntan qué hago aquí, seguro que piensan que estoy loco’. Pero les dije también: ‘Esperen a que se acerque el final, entonces entenderán lo que hago”, señaló en aquella atención a los medios.
El regreso del delantero con el Milán está programado para finales de mayo, cuando ya la temporada haya finalizado y solo quede por delante la final de la Champions en Estambul.