Lo que muchos pronosticaban que pasaría en cinco años, sucedió en menos de cinco meses. Aumentaron las conexiones a internet, las videollamadas se dispararon por el trabajo, la educación en casa y las soluciones basadas en inteligencia artificial y machine learning se convirtieron en herramientas indispensables para la vida diaria e incluso para la investigación del coronavirus. Hubo también avances en robótica, blockchain, ciberseguridad y la nube.
Pero sin duda el mayor efecto de la pandemia fue que por fin ciudadanos del mundo, empresas y Gobiernos experimentaron de primera mano los beneficios de la tecnología. Eso marcará el futuro.
Si 2020 fue el año de la aceleración de procesos, los que vienen traerán una adopción exponencial de tecnología. Para Jaime Galviz, gerente general de Microsoft Colombia, 2021 será un año de digitalización masiva, de la multiplicación de dispositivos y de conectividad permanente.
También será un tiempo marcado por la tendencia híbrida –una combinación entre lo físico y lo virtual– en sectores como el comercio, el trabajo, la educación, la banca, la salud y los servicios del Estado.
Será una época en que las empresas soportarán sus procesos en la nube y lo harán mediante arquitecturas multicloud y con escenarios híbridos.
Los datos también serán protagonistas. En las compañías se generarán grandes volúmenes de información que deberán contar con sistemas de alta capacidad de almacenamiento y velocidades de transmisión y procesamiento. Esto dará un punto de partida para la consolidación del análisis de datos y el big data, lo que abrirá las puertas a la era 5G.
Victoria Garzón, gerente de Google Cloud Colombia, destaca que la implementación de redes 5G será una tendencia que marcará al mundo en 2021. Si bien en todo el planeta comenzó el despliegue de la red en 2020, esta será clave para poner a rodar soluciones que necesiten de capacidades y velocidades de procesamiento de data gigantescas en el futuro cercano.
La inteligencia artificial también será un actor protagónico. Patricio Espinosa, gerente general de IBM Colombia, Venezuela y Región Caribe, cree que las empresas empezarán a priorizar el uso de esta tecnología por medio de herramientas como los asistentes virtuales, que son capaces de interactuar con el cliente final de una manera rápida y efectiva. Pero también lo harán para el análisis de datos y las predicciones para su negocio.
El próximo será un año en el que el internet de las cosas (IoT) despegará en el mundo, dice Fabiano Matos, gerente general de Oracle para Colombia y Ecuador. Se espera que cada vez más las ciudades utilicen el IoT para diseñar iniciativas que mejoren la experiencia de los ciudadanos.
Y en todo esto hay un actor clave: la ciberseguridad. Matos cree que los ataques cibernéticos serán cada vez más sofisticados, por lo que el mundo debe prepararse para enfrentarlos y hacer menos vulnerables sus sistemas.
Apuesta local
Colombia no escapó de esta realidad. Cientos de empresas y comercios en el país se dieron a la tarea de digitalizar sus operaciones y tener presencia en línea para satisfacer las necesidades de sus clientes y, sobre todo, para sobrevivir.
Y la transformación no solo se vivió en el sector empresarial. El sector salud, el académico y hasta el público experimentaron grandes avances que optimizaron sus procesos y que abrieron la puerta a un sinnúmero de oportunidades.
Lo que se viene para 2021 será una adopción mayor, teniendo en cuenta que la tecnología se ha convertido en el puente para la recuperación económica. Alberto Yohai, presidente de la Cámara Colombiana de Informática y Telecomunicaciones (CCIT), cree que será el año de consolidación de la tecnología empresarial. Esto se verá en la implementación de una modalidad híbrida de trabajo en el país y de las soluciones TI pensadas para facilitar la operación de las firmas a distancia.
Esta visión la comparte Ximena Duque, presidenta ejecutiva de Fedesoft, quien considera que Colombia debe trabajar fuerte para convertirse en referente tecnológico en América Latina. Para ello, el país deberá apostarle al desarrollo y exportación de soluciones de tecnología, donde ya se empieza a ganar terreno.
De hecho, hoy el país vende soluciones de este tipo a más de 30 mercados y la tasa de exportación viene creciendo a 9 por ciento anual. El mismo Gobierno ha señalado la importancia de la digitalización para lograr que el país levante cabeza y salga victorioso de esta crisis.
En ese sentido, la ministra TIC, Karen Abudinen, dice que 2021 será un buen año para potenciar las iniciativas relacionadas con la conectividad y formación de talentos. Se vienen inversiones del orden de 1,4 billones de pesos, para fortalecer las iniciativas que ha puesto en marcha el Ministerio de las TIC y para las que vienen en los próximos dos años.
Entre los planes están la instalación de más de 2.000 zonas digitales; la ejecución del proyecto de conectividad rural, con la que apuestan beneficiar con internet gratuito a más de 14.000 colegios en áreas rurales hasta 2031; la entrega de unos 192.000 computadores en 1.100 municipios, y la puesta en marcha del proyecto Última Milla Móvil, con el que buscan dar internet móvil a 120.000 estudiantes de universidades y colegios públicos.
La formación de talento TIC también es prioridad. La cartera enfocará en iniciativas como Misión TIC 2022, para formar más de 100.000 programadores; así como en Coding for Kids, un programa de formación en pensamiento computacional para docentes.
Para el sector productivo planean iniciativas como Vende en Línea, para ayudar a más de 9.000 empresarios a fortalecer su presencia on-line.
Y, siguiendo los pasos del mundo, el 5G está en los planes del Ministerio y de los empresarios. Luego de poner en marcha el Plan 5G con las pruebas piloto que se ejecutaron durante la pandemia, el próximo año se podría definir un nuevo modelo de administración de espectro para facilitar y agilizar el despliegue de esta tecnología en el país. Eso abriría las puertas a una eventual subasta.
La tarea incluirá la búsqueda de incentivos a la demanda de modelos de negocios para estas redes y se capacitará a la ciudadanía en el uso adecuado de las nuevas tecnologías.
Vienen años de grandes cambios, incluso más acelerados, en que los retos en adopción serán claves. Pero será necesario también hablar de la regulación de algunas tecnologías, un tema que en Colombia no se ha querido tocar, pero que llegará más temprano que tarde.