El presidente Gustavo Petro, tras participar en un evento en Zipaquirá, le anunció este martes, 24 de diciembre, al país el aumento por decreto del salario mínimo para el 2025.

El jefe de Estado informó que el incremento es del 9,54 %, dejando el salario del próximo año en 1,623.500 pesos, incluyendo el auxilio de transporte.

La decisión ha generado varias reacciones y cuestionamientos por parte de las centrales obreras y de los empresarios, quienes han calificado el incremento de populista y exagerado.

La Asociación Colombiana de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas, Acopi, sostuvo que el incremento del salario mínimo del 9,54 % está por fuera del presupuesto de los pequeños y medianos empresarial de Colombia.

Rodolfo Correa Vargas, director del gremio, señaló que el aumento decretado por el Gobierno Petro genera mucha preocupación entre los pequeños y medianos empresarios del país, debido a que desborda todos los presupuestos que tenían los empresarios y porque se aumentarán los costos de producción.

“Desborda todos los presupuestos que teníamos en materia de alza, todos estábamos máximo en un 7,5 %. En segundo lugar, va a aumentar los costos de producción al subir los salarios y esto va a implicar que va a disminuir la posibilidad de vincular un nuevo personal y los costos nuevos que representa para el empresario se van a tener que trasladar, necesariamente, a los precios de los bienes y de los servicios”, explicó Correa Vargas.

Además, el líder gremial, aseguró que esta cifra de 9,54% se aleja de la meta inflacionaria que tenía el Banco de la República, lo que deja muy preocupados a los empresarios.

Otro de los que se pronunció acerca del incremento del salario mínimo fue el presidente de la Andi, Bruce Mac Master, quien catalogó la decisión de populista y advirtió que este aumento traerá hambre para el futuro de los colombianos.

“Las decisiones populistas terminan siendo fiesta de pocos días y hambre hacia el futuro. Casi siempre se trata de hacer anuncios que mucha gente puede celebrar, pero termina en generando inmensos costos para toda la sociedad en el futuro, especialmente para los más vulnerables. Eso no es nuevo, eso ya lo han puesto en práctica muchos mandatarios de muchos lugares del planeta, y los resultados siempre son más pobreza, menos desarrollo, más desempleo, más costo fiscal para el Estado, y finalmente desespero de los gobernantes”, aseguró Mac Master.