En medio de las malas noticias que a diario se originan en Bogotá por el caos en la movilidad, la crisis del sistema de transporte público o los líos en el relleno sanitario, una nueva y positiva levanta el ánimo y despierta el optimismo por el futuro de la ciudad.Se trata de la inauguración del Centro Internacional de Convenciones Ágora, que pone a Bogotá a competir con las grandes capitales del mundo en materia de sedes para grandes eventos corporativos y de negocios internacionales, y confirma a la ciudad como un destino atractivo para la industria del turismo de negocios en la región.Puede leer: La economía se dinamiza a través de los clústerCon casi 64.883 metros cuadrados distribuidos en 5 pisos, Ágora Bogotá es un moderno complejo con las más altas especificaciones para realizar eventos, conferencias y reuniones académicas: ofrece un salón principal sin columnas, de 3.100 metros cuadrados con capacidad para 4.000 asistentes, así como otros 10 salones que pueden dividirse en 18 espacios para reuniones de entre 100 y 2.000 personas.El proyecto, liderado por la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB), su filial Corferias y el gobierno nacional (a través del Fondo Nacional de Turismo, Fontur), requirió invertir alrededor de 414.0000 millones de pesos. La Cámara puso la mayor parte, con 290.000 millones; Fontur contribuyón con 60.000 millones y Corferias aportó el terreno por un valor de 64.000 millones de pesos y estará a cargo de la operación. “Ágora es un regalo de los empresarios a Bogotá”, señaló Mónica de Greiff, presidenta ejecutiva de la Cámara, quien destacó que la capital colombiana está hoy en capacidad de competir con grandes destinos como París, Chicago o Barcelona para organizar grandes certámenes. Según cálculos de la CCB, el aporte económico derivado de las actividades que se realicen en Ágora podría representar un crecimiento adicional de un punto porcentual en el producto interno bruto (PIB) de la ciudad, cuando el centro esté en su cuarto año de funcionamiento.Le sugerimos: El drama textilPara la ministra de Comercio, Industria y Turismo, María Lorena Gutiérrez, Ágora es una gran noticia para el sector turístico. Especialmente, para el turismo de reuniones y convenciones que representa el 27 por ciento de los ingresos totales de esta industria en el país. Además, destacó que este tipo de iniciativas sirven para fortalecer la confianza de los inversionistas en el sector. “Ágora abre la oportunidad de ser un epicentro del turismo corporativo en Colombia y América Latina, lo cual traerá grandes beneficios para el sector y los servicios afines”, dijo. Según este ministerio, los turistas de eventos gastan en promedio 410 dólares diarios, 5 veces más que un viajero vacacional.Anualmente, Bogotá recibe alrededor de 473.711 visitantes nacionales e internacionales que asisten a algún evento (alrededor de 53 por ciento vienen del exterior) y se quedan en promedio 3 días. Esto le representaría a la capital, según cálculos, un ingreso anual estimado de alrededor de 253 millones de dólares.El gran estrenoÁgora se estrenó con pie derecho. Hace una semana tuvo lugar allí la cumbre mundial de jóvenes líderes más importante del planeta, One Young World, que reunió a más de 1.500 asistentes de 194 países que se han destacado por realizar proyectos de alto impacto. Y es solo el principio. Para antes de finalizar este año ya hay más de 20 eventos confirmados y para el año entrante otros 118, el más pequeño para 800 personas. Algunos de ellos son la Conferencia Latinoamericana de Turismo; el Congreso de Centros de Convenciones de Latinoamerica y el Caribe; el Encuentro Mundial de Big Data e Innovación; el Congreso Mundial de Neurocirugía; la Cumbre de las Américas de la Federación Latinoamericana de Odontología; la Asamblea Mundial Ecpat; y el Congreso Latinoamericano y del Caribe de Acuicultura.Análisis: El factor demográfico será clave para el futuro de la economía colombianaLa meta de la CCB es realizar en Ágora 212 eventos al año, en promedio, de los cuales espera que 20 se ubiquen dentro del ranking que hace la International Congress and Convention Association (ICCA), la asociación más importante del mundo en la industria de reuniones, que congrega a más de 1.000 actores y 418 ciudades de 90 países. La llegada de este tipo de encuentros, sin duda, impulsará la dinámica empresarial de la ciudad. Según la CCB, por cada evento masivo se activan entre 11 y 15 sectores de la economía, como el transporte, el turismo, la gastronomía, los servicios empresariales, la seguridad privada, la logística, el comercio, los eventos culturales, las telecomunicaciones y el sector hotelero, entre otros. Por esa razón, luego de analizar a fondo la vocación productiva de esta región, la Cámara identificó que la actividad turística de negocios constituye una de las de mayor potencial de desarrollo en Bogotá y Cundinamarca. De hecho, espera que en tres años Bogotá sea la tercera ciudad en materia de atracción y competitividad para grandes congresos y eventos empresariales después de Buenos Aires y São Paulo.  Con un registro de 45 eventos en 2015 y 2016, hoy es la sexta ciudad de la región en el tema. Además, este proyecto dinamiza otro conjunto de inversiones y una gran apuesta de renovación urbana para consolidar un distrito de ferias y congresos en Bogotá. Esto incluye la renovación de Corferias y la construcción de un hotel que se adelanta en sociedad con Pactia (del Grupo Argos). Será un Hilton de 17 pisos y 420 habitaciones que estará listo antes de finalizar 2018 y que complementa las cerca de 5.000 habitaciones -de hoteles entre 3 y 5 estrellas- que ya hay en la zona, junto con más de 600 establecimientos de comercio en el área de influencia. La Cámara también le hizo una propuesta de renovación urbana a la Alcaldía, que incluye comprar el edificio de la Empresa de Acueducto, con el propósito de ampliar Corferias y darles más espacio público a los visitantes. Lo cierto es que Ágora ubica a la capital en el mapa internacional de los grandes congresos y eventos. El Buró de Convenciones y la CCB hicieron un esfuerzo para que la ciudad entrara a la red Best Cities Global Alliance, un grupo de 12 metrópolis como Berlín, Dubái, Tokio o Melbourne, que comparten buenas prácticas en eventos y se apoyan mutuamente para atraer grandes congresos mundiales. Además, ICCA reconoció a la ciudad como una de las cuatro mejores gestoras de estrategias de promoción y mercadeo del mundo. Bogotá no tenía un centro de convenciones de estas dimensiones –será uno de los tres más grandes de la región– y se complementa e integra perfectamente con el recinto ferial de Corferias. Sin duda, un posicionamiento que seguirá transformando la cara de la capital.