Los agentes del mercado estaban a la expectativa de un pronunciamiento de las agencias calificadoras, luego de que fuera aprobada la ley de financiamiento que implicó una reducción en la tarifa de renta para las empresas y la permanencia del impuesto al patrimonio, entre otras medidas. Pero ahora, dichos pronunciamientos han confundido a más de uno: tanto Fitch como Moody‘s ratificaron sus calificaciones, pero ambas se pronunciaron en sentido contrario sobre la perspectiva de su evaluación. Es decir, mientras que Moody‘s cree que las cosas con la economía colombiana pueden mejorar, Fitch considera que la mayor probabilidad es que empeoren.En el primer caso, el de Moody‘s, la decisión de mejorar las perspectiva de la calificación, que es un indicio de lo que se podría esperar en su siguiente revisión de la economía del país, se explica por la recuperación en la actividad económica y los esfuerzos de consolidación fiscal que ha venido implementando la administración Duque para estabilizar los niveles de deuda del Gobierno.Lea también: A Moody’s las cuentas no le cuadranAdemás, dijo la firma, el perfil de deuda se mantuvo sólido a pesar del choque en los términos de intercambio sufridos durante el periodo 2015 y 2016."Desde la perspectiva de Moody‘s, las medidas que la administración del presidente Iván Duque planea implementar, acompañadas por una recuperación en la actividad económica estabilizarán la relación deuda PIB en los próximos años", dijo la firma en un comunicado.Para Moody‘s, la economía colombiana promete recuperar una senda de crecimiento en un rango entre 3% y 3,5% del PIB en los próximos años, acorde con la tasa potencial de crecimiento que ubica cerca de 3,5%."La dinámica económica estará soportada por una creciente inversión privada y un mayor consumo que compensarán la baja contribución del gasto público mientras el gobierno alcanza la consolidación fiscal", señala Moody‘s.Lea también: Moody’s enciende alerta fiscal sobre ColombiaPara la agencia calificadora, el Gobierno Duque logrará cumplir este año con la meta de déficit de 2,7% del PIB fijada en los compromisos de la regla fiscal. Esto será posible por cuenta de un incremento en los ingresos del gobierno gracias al impacto positivo de la ley de financiamiento aprobada en diciembre, sumado a la decisión de congelar una porción del gasto presupuestal de 2019.A pesar de que el recaudo sufrirá un golpe por cuenta de la reducción en las tasas impositivas de renta para las empresas y de algunas exenciones adicionales en el IVA, la estrategia para combatir la evasión, así como el control del gasto balancearán la estrategia y lograrán que la tendencia siga siendo a la estabilización.La opinión de FitchPor su parte, la calificadora de riesgo Fitch Ratings decidió ratificar la calificación de Colombia en BBB, sim embargo la perspectiva la bajó desde estable a negativa.Fitch explicó que la perspectiva negativa de Colombia refleja los riesgos para la consolidación fiscal y la trayectoria de la deuda pública, el debilitamiento de la credibilidad de la política fiscal y el aumento del riesgo de desequilibrios externos.Lea también: Fitch duda que Colombia cumpla las metas fiscales de 2020Esta calificadora espera que la reducción de los ingresos fiscales del Gobierno a partir de 2020, junto con los rígidos compromisos de gasto, lleven a un ajuste fiscal adicional necesario para estabilizar y luego disminuir gradualmente la deuda como proporción del PIB , que en 2018 estaba en 42,3% del PIB, por encima de la media los países con calificación ‘BBB‘ y que es de 37,5%.Fitch indicó además que espera que ese indicador continúe divergiendo de la mediana, en ausencia de una consolidación fiscal más rápida.