A solo tres días de definirse quién será el ganador del millonario contrato por 120.000 millones de pesos para proveer al Banco Agrario de servicios de comunicaciones y seguridad, se produjo otro ‘round’ en el agarrón que se inició el jueves, tras las denuncias hechas por el presidente de América Móvil, Juan Carlos Archila, sobre presuntas irregularidades en el proceso de adjudicación. Al señalamiento por parte de Claro, según el cual el Banco Agrario habría filtrado datos para favorecer a Movistar (el otro aspirante a ganar el contrato), la entidad financiera respondió con dureza: “Es falso que el Banco Agrario haya divulgado información confidencial de la propuesta de Comcel S.A. al otro proponente”. El Banco también indicó que es falso que Movistar no cumpliera con varios de los requisitos mínimos que otorgan el puntaje, como lo expresó Claro, argumentando que al entregar información reservada le daba ventaja al competidor para que mejorara la oferta.
En medio del rechazo a las acusaciones hechas por el vocero de Claro, el Banco Agrario indicó que está analizando todas las posibles acciones judiciales en contra de Comcel (Claro) a las que haya lugar. La respuesta de Claro no se hizo esperar. En una nueva carta enviada este viernes, insistió en que “no es la primera vez que la compañía denuncia este tipo de irregularidades en los procesos licitatorios”, por lo cual hizo un llamado a la Procuraduría para que “investigue a profundidad los hechos denunciados”. Recordó que en otra oportunidad había advertido sobre las irregularidades que se estaban presentando en el contrato del Sena, lo que finalmente terminó en la destitución de la exdirectora administrativa y financiera de la institución de educación pública. El Banco Agrario, por su parte, defendió la transparencia en el proceso, alegando que, así como Claro dice que se requieren funcionarios públicos íntegros, también son necesarias las empresas oferentes que acepten con gallardía sus derrotas. Señaló que el aspirante al contrato “pretende intimidar a los funcionarios públicos con acusaciones infundadas y temerarias con el fin de anular procesos idóneos donde sus intereses no han salido favorecidos”.
A esta aseveración, la compañía de telecomunicaciones dijo lamentar las declaraciones del presidente del Banco Agrario, en el sentido de que las denuncias presentadas solo buscan incidir en los funcionarios públicos que deben tomar la decisión. Entre cartas van y cartas vienen, Claro recusó al presidente del Banco Agrario y al Comité Evaluador por “prejuzgamiento y falta de imparcialidad en relación con una decisión que está prevista para tomarse el 21 de julio”, y pidió que sean designadas personas independientes e imparciales que estudien el caso.