Desde el año pasado, el país venía con una dinámica económica muy positiva, creciendo a niveles superiores al 3 por ciento. Sin embargo, la llegada del coronavirus le dio un giro de 180 grados al comportamiento de la economía y el país entró en recesión. Ecopetrol y Sura son quizá dos de los grupos económicos más importantes del país y, por supuesto, no han estado al margen de la profunda crisis que se empezó a acentuar desde mediados de marzo pasado. El mercado laboral ha sido tal vez el principal damnificado de la caída de la actividad económica, al tiempo que las restricciones impuestas para bajar la velocidad del contagio pusieron a prueba la solidez de la caja de las empresas. Muchas, sobre todo las pequeñas y medianas, no soportaron dicha presión y, según cifras de la SuperSociedades, se espera que las solicitudes de insolvencias en 2020 superen las 5.000. Se calcula que entre abril y mayo se destruyeron cerca de 5 millones de puestos de trabajo y si bien mucho analistas coinciden en que la economía ya tocó fondo, la recuperación del empleo no será una tarea fácil.
Para Gonzalo Pérez, presidente del Grupo Sura, la reactivación del mercado laboral debe ser la prioridad. “La recuperación del empleo empieza por el concepto social. Hoy más que nunca las personas que tengamos la capacidad de generar empleo lo debemos hacer, cuidando nuestros proveedores, distribuidores y generando inversión”, dijo. Ambos empresarios coincidieron en que esta recuperación no es solo una responsabilidad del Gobierno, sino del sector privado.“La crisis nos ha mostrado muchas cosas, la mayoría de ellas buenas. La mejor manera de recuperar el trabajo es permitiendo que todo tipo de compañías puedan seguir operando, generando oportunidades de trabajo y que la economía siga funcionando sin dejar de lado el cuidado de la salud”, indicó Felipe Bayón.
Frente a las reformas estructurales (laboral, pensional y tributaria) que necesita el país y que podrían aportar de manera significativa a la recuperación, los empresarios insistieron en que estas deben ser fruto de consensos y diálogo social entre todos los sectores del país. “En este momento debemos ser capaces de superar las coyunturas. No es el momento oportuno para las reformas porque podemos estar viciados por el presente, lo que quita perspectiva y profundidad. Es importante conversar con los que no piensan igual. Cuando conversamos con los mismos, lo único que hacemos es ampliar brechas”, explicó Pérez. Otro punto al que se refirieron está relacionado con el creciente descontento social que se viene presentando desde finales de 2019. Para los empresarios, este fenómeno pone sobre la mesa el hecho de que no solo basta con crecer y que la búsqueda de equidad debe ser uno de los nuevos objetivos.
“Hay inconformidad y preocupaciones en muchos sitios del país, por lo que es fundamental la construcción de confianza. Los petroleros a veces hemos sido arrogantes, debemos construir diálogo y de manera conjunta encontrar soluciones”, dijo Felipe Bayón, presidente de Ecopetrol.
Dichas tensiones sociales han llevado a preguntarse si el modelo económico se agotó. Según Pérez, el modelo tiene que evolucionar: "No nos podemos quedar en frases de cajón de capitalismo consciente; es claro que en el mundo hay inequidad. La primera parte del modelo mostró que hay que generar riqueza, la segunda parte es cómo la distribuimos”. Finalmente, para Bayón, más que pensar en un modelo u otro, se debe pensar en la sostenibilidad, la inversión social, el buen gobierno y tecnología. “Hay que ser responsables y entender que tenemos un rol fundamental y unas responsabilidades”, concluyó.