Uno de los servicios públicos que más ha elevado sus precios es el de la energía, que afecta especialmente a los hogares y que, en consecuencia, tiene un impacto en las finanzas familiares.
No basta con apagar los bombillos de las zonas de la casa donde no se esté, pues hay consumo que pasa desapercibido y al finalizar el mes se ve reflejado en la factura.
Es el llamado ‘consumo fantasma o invisible’, que es producido por los aparatos eléctricos que se dejan enchufados, aunque estos no se estén usando.
De acuerdo con la Agencia Internacional de Energía, este consumo podría representar entre el 5 % y el 10 % del total diario de la electricidad utilizada. Un manejo adecuado de este consumo se podría ver reflejado en la factura.
Por su parte, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), en España cada hogar consume unos 300 kWh de electricidad al año, y entre el 7 % y el 11 % corresponden al consumo fantasma.
Por eso, la recomendación es desconectar aquellos aparatos que, aunque estén apagados, se dejan conectados al tomacorriente, lo cual genera consumo. Es el caso de los computadores de mesa (PC), el televisor, el router, el teléfono inalámbrico, la cafetera, la tostadora y el microondas.
Expertos han indicado que los decodificadores TV son uno de los elementos a los que se les debe poner atención, ya que pueden consumir entre 41 y 64 kWh al año y que, por consiguiente, se verá reflejado en la factura del servicio de energía.
Muchos de estos equipos poseen un transformador en su interior que adapta el voltaje (de los 230 voltios de la red eléctrica a los que necesite el aparato) a través de dos bobinas. Aunque el dispositivo no esté funcionando, una de estas bobinas siempre sigue activa.
Cargadores de celular
En relación con los cargadores del celular, cuando se tiene enchufado, pero sin tener el móvil conectado (ya sea con el cable puesto o sin él) su consumo es inferior a 0,2W.
“De hecho, para que mi medidor de consumo detectara un consumo ‘fantasma’ de 0,5W he tenido que conectar cuatro cargadores a un alargador, pues hasta con tres no detectaba nada (recordemos que tiene una sensibilidad mínima de 0,5W)”, según el portal especializado Xataca.
Añadió que cuando se está “cargando el móvil y este completa su carga, el consumo baja de los aproximadamente 7,5W (12W si es una tablet) que muestra mientras se carga a menos de 2W, que es más o menos el consumo del móvil en reposo”.
“Así que no pasa nada por dejar cargando el móvil más tiempo del estrictamente necesario, ya que con esos 2W nos estamos ahorrando gastar batería, que tendríamos que cargar de nuevo igualmente. Otra cosa es lo que pueda afectar a la vida útil de la batería”, puntualizó.
Cómo evitarlo
Los especialistas han hecho varias recomendaciones para evitar el ‘consumo fantasma’ como:
- Utilizar enchufes, sean múltiples o no, con interruptor, para poder apagar de forma sencilla un conjunto de aparatos, como el computador, la impresora o las consolas de videojuegos.
- Usar temporizadores: De manera que los aparatos electrónicos se apaguen solos a la hora que se programe.
- Etiquetado energético: Este aparece en los electrodomésticos y no indica también el consumo en reposo. Se recomienda comparar diferentes marcas antes de comprarlo, para asegurar un menor impacto en el consumo fantasma.
- Enchufes con eliminador de stand by: Existen de dos tipos. Uno que tiene un enchufe principal, y que cuando detectan una reducción del consumo del aparato conectado apaga el resto. El otro, es un pequeño receptor que podemos configurar para encender y apagar con algún control a distancia, como el televisor, que al hacerlo también apaga, por ejemplo, las barras de sonido y videoconsolas.
- Modo vacaciones: Una de las principales recomendaciones es desconectar los electrodomésticos cuando vamos a salir de vacaciones, debido a que va a ser por varios días. En la mayoría de los casos, se deja conectado solamente la nevera.
- Medidor: Se puede instalar un medidor de electricidad en cada equipo, para determinar el grado de consumo y tomar la decisión de apagarlo y desconectarlo cuando este supere los niveles normales. Estos aparatos miden el voltaje, la intensidad y el consumo de cualquier aparato que sea enchufado con un margen de error del 0,5 % y una sensibilidad mínima de entre 0,25W y 0,5W según el modelo y el fabricante.