El presidente Gustavo Petro, sin tapujos, confirmó este fin de semana que Colombia suspendió, temporalmente, las exportaciones de carbón a Israel, recalcando que esta medida estará en vigor hasta que esa nación detenga el “genocidio” contra Palestina.
“La República de Colombia ha decidido establecer una medida de prohibición a las exportaciones de carbón hacia Israel. Que dicha medida se justifica bajo el artículo XX(a) del GATT 1994, ya que éste permite a los Países Miembros de la OMC la implementación de medidas necesarias para proteger la moral pública”, dice el decreto que firmó el mandatario.
Luego, precia: “En tanto el Órgano de Solución de Diferencias de la OMC le permite a los miembros definir dicho concepto, para la República de Colombia proteger la moralidad pública implica proteger la idea del Estado social y democrático de derecho, es decir, proteger la dignidad humana, la igualdad, la democracia y el cumplimiento de los derechos humanos”.
Frente a este anuncio, la Asociación Colombiana de Minería no ocultó su preocupación y señaló que con esta decisión se estarían incumpliendo compromisos internacionales adquiridos por Colombia que deben ser respetados, poniendo en riesgo la confianza en los mercados y la inversión extranjera.
La entidad, de igual manera, aprovechó la coyuntura para puntualizar que esas exportaciones de carbón le representan al país cerca de 650.000 millones de pesos anuales, entre impuestos, regalías y contribuciones. Asimismo, recordó que Colombia e Israel suscribieron un Tratado de Libre Comercio, que se encuentra vigente desde el 2020.
“Este tipo de medidas debe sopesar las implicaciones económicas y sociales para el país y las regiones. Israel es un destino clave para las exportaciones de carbón térmico de Colombia, representa en impuestos, regalías y contribuciones por 650.000 millones de pesos cada año, de los cuales más de 100 mil millones van directamente a las regiones de La Guajira y el Cesar”, recalcó inicialmente.
Además, sentenció: “Excepcionalmente se permiten restricciones temporales únicamente sobre bienes esenciales, bajo circunstancias críticas y específicas que deben estar suficientemente comprobadas. Podrían verse afectados otros Acuerdos Internacionales que cobijan las condiciones de comercialización de las empresas exportadoras de carbón”.
La asociación apuntó finalmente que en una coyuntura económica compleja como la actual, con los bajos niveles de recaudo y profundas necesidades en materia de inversión social, es indispensable ponderar con responsabilidad la viabilidad de este tipo de medidas, que no se puede tomar a la ligera.
Hay recordar que el jefe de Estado colombiano reconoció en la clausura de la convención de Asobancaria, que se llevó acabo en Cartagena esta semana, que su Gobierno cometió un error en el afán de mostrar que la reforma tributaria era exitosa.
“El año pasado fue exageradamente alto el recaudo de impuestos, y aquí tenemos que decir por qué, porque hubo un error del Gobierno, la Corte Constitucional tiene razón en eso. En febrero del año 2023, recién aprobada la reforma tributaria, en el intento de mostrar una reforma tributaria exitosa, es decir, que recaudaba más, se expidió un decreto que aumentó sustancialmente los anticipos de renta, de impuesto de renta y la retención en la fuente. Mortal”, admitió Petro.