Mientras los colombianos están bajando el consumo de leche, por múltiples razones, principalmente la del precio, los pequeños productores están en apuros, con ganancias disminuidas y enfrentando la dura competencia del producto importado.
Se habla así de una crisis del sector lácteo, tema que viene andando desde hace varios meses y que ha motivado mesas de trabajo entre el gobierno y los productores.
Todos los sectores de la economía son claves para el mantenimiento del empleo, pero también, para el impulso de la producción en el país. En el caso de los lecheros, se trata de 321.000 productores, la mayoría de los cuales son pequeños, cuyo ingreso depende totalmente de esa actividad productiva en el campo.
Aunque los consumidores sienten que el precio del producto se quedó alto desde que la inflación lo impactó, los productores hablan de otros problemas, como la informalidad, que está presente en más de la mitad de la producción de la leche cruda. Pero también están afectados por la avalancha de leche importada que entra al país, lo que conduce a que la industria.
Lo cierto es que estarían enfrentando una difícil situación, ante decisiones de grandes compañías, de dejarles de comprar cantidades de litros de leche.
Un salvavidas
En ese contexto, es Alpina la que sale a plantear una alternativa. La gran empresa manifiesta que su objetivo es “contribuir con la mitigación de la crisis del sector lácteo”.
Hasta el momento, la empresa avanza en un acuerdo con el Ministerio de Agricultura, para la compra y pulverización de excedentes de leche de los pequeños ganaderos, explicaron.
Para programas sociales
La idea es que quede a disposición del Gobierno la planta pulverizadora de la compañía, en la cual, “se podrá transformar la leche cruda en un producto terminado que será destinado a los programas sociales de alimentación”.
En ese sentido, la empresa de la industria lechera resalta la importancia que tiene el trabajo conjunto del sector privado con el Estado, algo que muchas veces, se ha visto amenazado, por mensajes desde el gobierno que evidencian una ruptura de la administración con el sector privado.
Para Alpina, la propuesta lanzada buscaría “minimizar el impacto económico y los desperdicios de la cadena láctea”.
Carolina Espitia, presidente de Alpina Colombia, dijo que lo importante será “encontrar soluciones de fondo para los desafíos del sector desde todos los frentes de la cadena. Con esta propuesta buscamos ser parte de un plan que contribuya a evitar los excedentes de leche en el país que hemos visto en los últimos meses”, dijo la directiva.
¿Qué hacer para subir el consumo?
La decisión de consumo de leche, por parte de los colombianos, depende de varias situaciones. Además del precio, no hay que desconocer que existen campañas que desestiman la importancia de la leche en la nutrición. La compañía que lanza la propuesta para enfrentar la crisis láctea, señala que, ante ese reto (la disminución del consumo), también avanzan en la implementación de acciones para promover los beneficios nutricionales de los lácteos y agregarle innovación a los productos hechos a partir de la leche.