La línea de pobreza monetaria en Quibdó está definida en $393.024 por mes. Esto quiere decir que si una persona gana más de este monto, no es considerada como pobre. La línea de pobreza monetaria en Quibdó está por encima de la línea nacional, que es de $324.674 al mes.
Según el Dane, la pobreza monetaria en Colombia fue del 35,7% en 2019 (en 2018 era del 34,7%), con Quindío, Meta, Santander, Antioquia, Caldas, Risaralda, Atlántico, Bogotá, Valle del Cauca y Cundinamarca como las zonas con la pobreza monetaria inferior al promedio nacional. Lea también: ¿Colombia midió mal la pobreza durante 10 años? En cuanto a la línea de pobreza extrema en Quibdó, esta es de $160.862, cifra superior al promedio nacional, que es de $137.350. Según el Dane, Chocó también es el departamento con el mayor índice de pobreza monetaria extrema, al registrar un 38,8% en 2019, mientras que en La Guajira es del 33,5% y en Cauca, del 26,6%.
En 2019, la pobreza monetaria extrema en Colombia aumentó desde el 8,2% hasta el 9,6% con Atlántico, Risaralda y Bogotá como las zonas del país en las que menos pobreza extrema había. La modificación en la medición de la pobreza en el país hizo que distintas entidades, como Fedesarrollo, proyectaran que más de seis millones de colombianos entrarán en pobreza este año por culpa de la pandemia.
“Una vez se contabilizan las ayudas del Gobierno, la pobreza moderada se incrementa 8,4 puntos porcentuales (pp) con respecto al valor observado en 2019 (aproximadamente 4,2 millones de nuevas personas en situación de pobreza que se suman a los 18,4 millones que ya existían, para llegar a 22 millones) y la pobreza extrema se incrementa 2,6 pp. Esto último significa que cerca de 1,3 millones de personas han comenzado a sufrir una situación de hambre y desnutrición cuyos efectos pueden ser irreversibles. En síntesis, la pobreza extrema alcanzará una cifra absoluta cercana a los seis millones de personas”, dijo Fedesarrollo. Lea también: Hogares en Colombia superan la pobreza extrema con $549.400 al mes Para disminuir la pobreza, Fedesarrollo recomienda seguir manteniendo los programas de ayuda y giros directos que le entrega el Gobierno a la población vulnerable, pero además pide intensificarlos (si se puede, ampliar el monto), así como implementar políticas públicas diferenciales para las regiones del país más afectadas por la pandemia (aquellas que dependen del turismo). “El país no tiene ni la capacidad fiscal ni el nivel de desarrollo para adelantar una renta básica universal, por lo que debe fortalecer programas que están bien focalizados mediante un ingreso mínimo que solo beneficie a quienes realmente lo necesiten. En particular, se recomienda cubrir al 40% de la población con una transferencia de mayor valor (cercana a $290.000), mientras se alcanza la recuperación económica y social”, dijo Fedesarrollo.