Según Corficolombiana, un aumento desmedido del salario mínimo puede afectar de manera directa, no solo la generación de empleo, sino los trabajos formales que ya hay en el país. “Hay evidencia de que los aumentos excesivos del salario mínimo encarecen el trabajo formal e incrementan la informalidad y el desempleo. El choque en el empleo y los ingresos de los trabajadores hace evidente la urgencia de flexibilizar las condiciones para generar empleo de calidad”, dijo Corficolombiana. Lea también: ¿Cómo han sido las negociaciones del salario mínimo durante los últimos años? Y es que las negociaciones sobre el incremento del salario mínimo de 2021 tienen grandes diferencias, pues los trabajadores solicitan una subida de más del 13% (llevar el salario mínimo a $1 millón), mientras que los empresarios consideran que el incremento debe ser del 2% (quedaría el salario en $895.359). Por su parte, los analistas de Corficolombiana creen que un incremento del salario del 2,5% (lo cual llevaría el mínimo a $900.000) sería consecuente con el desempeño económico que se ha visto en 2020 a causa de la pandemia. “El aumento del salario mínimo para 2021 debe incorporar que en 2020 la inflación será cercana al 1,4% y la economía se contraerá más del 7%. Un aumento del 2,5%, equivalente a un salario mínimo mensual de $900.000, puede ser consistente con esta situación”, dijo. Según los analistas, el incremento del salario mínimo ha favorecido, principalmente, a los ocupados formales en el país (los que cotizan seguridad social), pues estos han evidenciado aumentos consecutivos del salario mínimo que han estado por encima de la inflación. Sin embargo, los ocupados informales han sido afectados por el incremento desmedido del salario mínimo pues no han podido acceder a un empleo formal. Además, según Corficolombiana, los informales han sufrido una pérdida de ingresos del 11% por culpa de la pandemia del coronavirus. Lea también: Empresarios proponen un aumento del salario mínimo del 2% para 2021 Varios analistas consideran que los incrementos desmedidos del salario mínimo lo que han hecho es ampliar la brecha entre trabajadores formales e informales en el país. “La discusión sobre el salario mínimo debe tener en cuenta la estructura del mercado laboral colombiano y reconocer que este beneficia solo a la mitad de los trabajadores, los formales. Las rigideces del mercado dejan por fuera a la otra mitad, cuyos ingresos se deterioran cada vez más”, dijo Corficolombiana. El análisis, por último, señala que el salario mínimo en Colombia determina el ingreso de los ocupados formales y representa el costo del trabajo para las empresas.