En 2019, la llegada de Inversión Extranjera Directa (IED) en Colombia se disparó y creció 25,6%, alcanzando los US$14.493 millones. Esta cifra es la más alta en los últimos seis años, según datos de la Balanza de Pagos del Banco de la República, que detalló que el flujo de inversión aumentó en US$2.958 millones frente al 2018. La distribución por actividad económica de la IED recibida en este periodo fue la siguiente: minería y petróleo (31,9%), servicios financieros y empresariales (20,6%), comercio y hoteles (14,7%), industria manufacturera (10,7%), transporte y comunicaciones (8,6%), electricidad (2,1%) y el resto de sectores (11,4%). Por tipo de aporte de capital, se estima que del total de ingresos recibidos por IED en el 2019, el 50,1% correspondió a nuevas participaciones de capital, el 34,2% a reinversión de utilidades, y el 15,7% a pago de deudas entre empresas con relaciones de inversión directa.
Remesas en máximo histórico Por otra parte, los ingresos por remesas de trabajadores ascendieron a US$6.744 millones en 2019, su mayor nivel en la historia. Estos ingresos son equivalentes al 2,1% del PIB y al 9.8% de los ingresos corrientes de la balanza de pagos. "Los principales incrementos de ingresos de remesas se observaron en las enviadas desde Estados Unidos y España, con tasas de crecimiento de 10% y 12%, respectivamente", resalta el informe del Banrepública. También aumentaron las remesas provenientes de Canadá y Australia, aunque a tasas menores que las de un año atrás y, por otra parte, se redujo el envío de remesas desde Argentina, México y Costa Rica. El lunar del reporte del Emisor fue el déficit de cuenta corriente, que cerró el año pasado en -4,3% del PIB, superior al -3,9% registrado en el 2018. El desbalance total alcanzó los US$13.800 millones, según el banco central.